Galería Nocturna: Hazme reír - El rey de la jungla y sus víctimas (TV)

151/03(02/05/23) Siguiendo con mi ciclo de tras el estreno de “Los Fabelman”, cinta autobiográfica de Steven Spielberg, sigo escudriñando en sus orígenes, y ahora le toca a este episodio de la serie creada por el gran Rod Serling para la NBC, en la estela de la serie que él mismo creó, la mítica “The Twlight Zone” (1959-1964), con presentación de Serling, en este caso lo hace en una galería de arte donde a través de un cuadro hace una alegoría sobre la historia que veremos, un episodio auto conclusivo de carácter sobrenatural, esto lo hacía en sesiones de dos capítulos, excepto el piloto que fue con tres, y donde también estaba Spielberg con su “Ojos”. Este era el cuarto episodio de la primera temporada, y el que abría el capítulo se titula “Hazme reír”, con guion, como casi todos, de Rod Serling, dirige el ya mencionado Spielberg, con 24 añitos se entrega a una prototípica historia que arremete con una moraleja bastante manida del clásico, ‘Ten cuidado con lo que deseas…’.

Estamos en la primera etapa del rey Midas de Hollywood, cuando comenzaba en tv, y aquí pocas marcas se pueden ver del genio que está por venir, todo es muy tópico, previsible, se ve venir de lejos, solo destacaría por la fuerza dramática la primera escena en que el impregna de patetismo al protagonista en una actuación de cómico de stand up (monologuista) en un club, cual ametralladora suelta chistes y el público los toma de modo serio y flemático, y mientras sucede vemos al protagonista sudoroso y nervioso ante el público hostil. Tras ello tenemos una secuencia en el camerino del protagonista con su representante donde los actores se acercan de modo un tanto sobreactuado a la cámara de espaldas a su compañero paras remarcar emociones un tanto artificioso, cercano a romper la cuarta pared. Resto del capítulo es bastante estereotipado en el mantra de no siempre lo que deseas te llevará a la felicidad, que no siempre el camino más corto a tu objetivo es lo mejor, que lo correcto es llegar a tus metas con tu esfuerzo e ingenio. Todo para desembocar en un final pretendidamente impactante, pero en realidad no demasiado punzante. Refuerza aquello que luego se ha hecho patente durante la filmografía spielbergiana de que al director de “Salvar al soldado Ryan” nunca se le dio bien el género de la comedia.

Jackie Slater (Godfrey Cambridge) es un comediante que no puede hacer reír a nadie. Acaba de ser despedido de su último trabajo e incluso su leal agente (buen Tom Bosley) sugiere que podría ser el momento de tirar la toalla proverbial. Mientras Jackie ahoga sus penas en un bar, un hombre llamado Catterje (Jackie Vernon en una caracterización ridícula con traje y extemporáneo turbante) se le acerca. Chatterje explica que puede lanzar milagros, pero, debido a que no es muy bueno en su trabajo, los milagros a menudo tienen consecuencias no deseadas. "No me importa!" Jackie dice: "Me arriesgaré!" Jackie quiere que la gente se ría de él. Jackie cumple su deseo, pero resulta que debería haber escuchado la advertencia de Chatterje.

Aparte de la dirección bastante plana, donde es complicado encontrar migas de pan del cine que está por venir del de Cincinnati. Destacar en todo caso la chispeante actuación protagónica de Godfrey Cambridge, dotando a su extrovertido rol de carácter fuerte, conmueve en su desesperación, en sus vaivenes, poseedor de una expresividad notable. Godfrey Cambridge falleció a los 43 años en 1977, por un infarto, se dice que pudo ser causado por la dieta para pasar de 70 kg a 140 para interpretar al dictador ugandés Idi Amin en el telefilm “Victoria en Entebbe”, papel para el que se estaba preparando y no llegó a interpretar, al final le sustituyó Julius Harris. Por cierto, el actor era en realidad un cómico de stand up de enorme éxito en USA; Como curiosidad señalar la presencia de Al Lewis como adusto gerente del club nocturno del principio, el actor dio vida al Abuelo en la popular serie “La familia Monster” (1964-1966).