Mil uno

A.V. Rockwell utiliza todo lo que tiene a su alcance para retratar el drama de una mujer que intenta salirse del sistema y así lograr un equilibrio en su vida y en la de los suyos.
El drama de toda una generación en los 90, excelentemente interpretado por Teyana Taylor.
Una película que da un vuelco trascendental en una historia que tranquilamente podría ser verídica.
Es sin dudas un boleto de ida para una madre y su hijo que luchan contra viento y marea por tener una vida digna en una ciudad que, todo el tiempo, les juega en contra.

*¿Por qué sigues abandonándome?

Bastan unos pocos fotogramas de Mil uno para transportarse al vecindario de Nueva York donde se desarrolla esta desgarradora historia. Las grandes y archiconocidas estampas de la ciudad dan paso a un entorno mucho más violento y cruel; un entorno urbano en el que la dureza de las calles también se traslada a las viviendas de su población.

Y es en esa lucha donde nos sitúa directamente la cinta que nos ocupa, en la que una joven protagonista retorna al lugar que la ha visto crecer y donde dejó al hijo que durante mucho tiempo ha vivido entre padres adoptivos e instituciones. Nace ahí otro conflicto que se extiende a lo largo de las casi dos horas de visionado, el dificultoso vínculo materno filial entre Inez y Terry.

Tras tener un accidente mientras escapaba de su familia adoptiva, Terry será raptado en una decisión temeraria por Inez, trazando así un destino juntos en el que las cosas no le serán fáciles a ninguno de los dos.

“¿Por qué sigues abandonándome?”, pregunta el niño. Una cuestión que dejará diferentes preguntas en el aire sobre el futuro de ambos y que servirá de excusa para una entretenida historia sobre la maternidad, el esfuerzo y el contexto socio-político de los años 90 en la comunidad negra.

*Teyona Taylor o cómo hacer tuya toda una película

Ya sea por su pasado o por su temperamento directo y vehemente, el personaje de Teyona Taylor arrasa desde su presentación en pantalla. La protagonista de Mil uno nos rememora grandes figuras maternas que ya han quedado plasmadas en fotogramas y que son capaces de hacerse con una película entera meramente con su presencia en escena.

Por ello, cabe destacar la magnífica interpretación de la cantante y actriz, que regala secuencias tan lacrimógenas como esperanzadoras sin caer en el victimismo o la caricatura.

*Un drama convincente a pesar de sus carencias

Mientras que la relación materno filial de Mil uno actúa como columna vertebral de la misma, cabe destacar el sólido guión de Rockwell que navega entre diferentes etapas de los personajes y nos ofrece en cada versión los ingredientes necesarios para conectar con ellos y sus complejidades.

La complicada niñez de Terry da paso a una no menos turbulenta adolescencia y adultez que, para suerte del texto, no se presentan tan desdibujadas como la fortuna de sus protagonistas. Sin embargo, es inevitable encontrarse con títulos del género como las laureadas Moonlight y Precious durante el visionario; largometrajes donde cualquiera puede reconocer matices definitorios. *Spoiler*

*Conclusión

Como el dibujo de su propia protagonista, Mil uno resulta agresiva, conflictiva y tierna por momentos. Estamos ante un espejo cotidiano que bien podría servir para una larga lista de colecciones de cine de corte social, donde tendría un hueco más que merecido por su innegable calidad y espíritu, pero donde no destacaría por su singularidad.

Escrito por Antonio Fuentes Belando