El llanto de la mariposa

Obra dirigida por el prolífico Frank Strecker ("Anna"), especializado en trabajos para televisión. La película es una obra televisiva adaptada a la pantalla grande. Obtuvo el "German TV Award" a la mejor dirección musical, de la Academia Alemana de Televisión y el premio "Golden Gryphon" al mejor director, del Griffoni Film Festival (2000).

La ación tiene lugar en una localidad no determinada de Alemania, en el momento de realizar la obra (1998). Narra la historia de Paulina (Marie Zielcke), una muchacha de 17 años, sin padres, que vive con el abuelo Edu (Dietmar Schöenherr), por quien siente un gran afecto. Es moderna, alegre, como lo fue su abuela, aficionada a la música joven y forma parte de un grupo musical femenino de hip-hop. Tras una de sus actuaciones conoce a Pablo Thiess (Marek Harloff), de 18 años, introvertido, callado, que ha sido expulsado varias veces del internado por robar cosas qur no necesita, a quien su madre Susana (Hannelore Elsner), separada, presta escasa atención. Paulina queda prendada de sus ojos, que le parecen muy bonitos. Ella padece una leucemia linfática y Pablo se siente solo, desanimado y desilusionado. La amistad entre ambos cambiará muchas cosas. Paulina es afectuosa y carñosa: se vuelca en dar cariño a quienes más lo necesitan, como Bruno, un chaval enfermo que sueña con visitar Arabia. Sabe que la vida es difícil para todos y que hay que esforzarse para vivirla con la mayor alegría posible. Se dice a ella y dice a los suyos: "mete las penas en un saco, tíralo y sonrie". Sabe que los problemas ocultos hacen mucho daño, por ello trata que Pablo se sincere con él mismo y con ella, le explique las causas de su pesar y las afronte abiertamente. Con su cariño, sus atenciones y su alegría Pablo, Edu y Bruno descubren un mundo diferente.

La música es un componente muy importante de la película. Incorpora interpretaciones de Tito Larriva, como "Cry Of The Butterfly", que da título a la obra. La música orquestal de continuidad ofrece una suite de Bach y "Il vecchio castello", de la fantasía "Cuadros de una exposición", de Mussorgsky/Chopin. La fotografía, de Jürgen Jürges ("Código desconocido"), hace uso frecuente de iluminaciones naturales de fondo, de imágenes nocturnas festivas de buena definición y de movimientos de cámara sugestivos. El guión construye bien una historia compleja, sutil y delicada, sin caer en sentimentalismos. La interpretación corre a cargo de actores noveles, poco conocidos en el mundo del cine, que cumplen con interés y corrección. La dirección, experta en el mundo de la imagen, realiza un buen trabajo, si bien posiblemente se excede en tiempo y detalles en la descripción de la estancia hospitalaria de la chica.

Película de jóvenes, de enfermedades del cuerpo y del alma, de amor y desarraigo, que exalta las ganas de vivir, la conquista diaria de la alegría y los valores de la solidaridad.