Usted primero, por favor

Interesante película bastante olvidada sobre el mundo de la televisión tomada desde un punto de vista satírico dónde el humor negro, muy al estilo del humor británico, hace que la cinta aguante a día de hoy. Una película bastante original, que me ha sorprendido. A día de hoy, esta desconocida película aguanta y no se hace nada pesada.
El argumento: un programa de televisión dónde los presos condenados a muerte tienen la opción de morir en directo (o salvarse, aunque pocos lo hacen). Si mueren, su família gana dinero (y si, por ejemplo, lo decapitan y la cabeza queda mirando hacia arriba, ganarán más dinero, como pasa al inicio de la película).
Quizás, la trama del personaje del mafioso, una trama que se incorpora en un momento bastante avanzado del film, rompe con el humor que habíamos visto hasta ahora, pero es una película que vale la pena darle una oportunidad.

Deathw Gameshow (Usted primero, por favor) es una película guionizada y dirigida por Mark Pirro en 1987, música de Gregg Gross y fotografía de Craig Bassuk. La televisión siempre ha sido un tema recurrente, muy recurrente para el cine, la estabilidad y el equilibrio entre dos de los medios más potentes en producción para grandes grupos empresariales y por supuesto de audiencia, tratado en metrajes como ‘Network un mundo implacable’, ‘Los reyes de la noche’, o ‘Morning glory’. Nada se escapa a los guiones susceptibles acaparando los intrincados mundos de la televisión desde cualquiera de sus ámbitos.

El sarcástico Chuck Toedan (John McCafferty) campa a lo largo de un metraje donde la exageración de lo burlesco aderezado con macabro humor, muestra desde lo festivo, lo que supone un programa concurso en el que la complicidad global es un hecho corroborado por medio del sermón satirizante de su director que no duda en poner en escena los elementos necesarios para satisfacer las demandas de la audiencia dueña del share que todo lo domina y de lo que todo depende.

Vidas a concurso, familias expectantes y un público en plató entregado a la aparente frialdad y el temple de los participantes intentando sacar el mayor beneficio de la situación poniendo a prueba la elección que les puede cambiar todo en un santiamén por medio de un macabro juego en directo donde no pueden faltar los premios ni los aprovechados buscadores de algún tipo de beneficio personal aunque para ello se deba echar mano de las influencia o de las insinuaciones donde el equívoco juega un papel fundamental en la narración.

En sus inicios nadie llegaría a sospechar que este innovador medio de comunicación se convertiría en un gran filón para la participación y los concursos donde el prime time puede cambiar las expectativas en éxito o fracaso para las cadenas de dudosa parrilla, y todo para satisfacer a la querida y deseada audiencia siempre dispuesta a aceptar inicialmente lo que se les ofrece, acertadamente reflejado en este metraje donde su presentador estrella se convierte en elemento de atracción fundamental para el éxito embriagador entre apasionados admiradores y furibundos detractores.