Cuidado con el coche

En tiempos de Franco se hicieron comedias tan buenas como Bienvenido…, Historias de la radio o Atraco a las 3. En tiempos de Breznev, un director como Ryazanov hacía comedias tan divertidas, ingenuas y hasta tiernas como esta.
Es solo para concluir que no todo lo que la sociedad hace en una dictadura es malo, ni todo lo que se hace en democracia es bueno. Parece obvio, pero no lo es tanto, al juzgar por algunas críticas que leo aquí, donde la ideología predomina sobre un juicio estético.
Ryazanov toma elementos del cine americano, del italiano y del francés, pero hace una comedia original, con un personaje que el actor, que se llama Innokenti (Inocencio, y le pega) clava. Él roba a gente que ya roba y el producto lo entrega a orfanatos. Él se crió en uno de ellos.
En fin, la película sirve también para dar idea de la sociedad urbana en Rusia, en esos años sesenta, ya muy influida por modas norteamericanas, a pesar de la dictadura. Talmente como ocurrió aquí y hasta hoy.