Terror y feria (Serie de TV)

...y aunque no lo seas, te matará la vergüenza ajena.

Colosal truño perpetrado por ese ente bicéfalo conocido como "LosJavis" (esta vez en calidad de productores) "Terror y feria" pretende venderse como la versión cañí y humorística de series míticas como "Twilight Zone" o, más recientemente "Black Mirror", pero pasada por el túrmix (y la picadora, y la licuadora, y la Thermomix) de la generación youtuber y la gayvindicación javiloide y POPortunista.

Y no.

Lo siento, pero las cosas no funcionan así. La serie es una mierda chapucera y sin sentido, que se limita a plantear cuestiones como "¿Y por qué no puede un fantasma ser transexual?" sin que a nadie se le ocurra hacerse la pregunta de verdad relevante, que es "¿Y qué aporta a la historia que el fantasma sea transexual?". No va a mejorar porque aparezca Alaska en una intro, ni porque Benja de la Rosa se ponga camisetas-homenaje a sus directores favoritos.

Y Marifé la muñeca homófoba pierde la gracia a los 30 segundos aproximadamente.

Lo peor no es que la serie sea mala (pero mala a nivel de corto de aficionados), sino que que no sea consciente de su cutrez. RECOMENDADA EXCLUSIVAMENTE A PETARDAS Y MODERNAS DE PUEBLO.

No me voy a extender con esta crítica, esta serie es un pufo total y absoluto. Bajo premisas que podrían dar juego (una muñeca homófoba o un fantasma transexual) nos encontramos...la nada más absoluta. Guiones terribles e ideas nulas (aunque tengas una buena idea en tu premisa necesitas que las ideas que aparecen en el desarrollo sean buenas también). La típica obra que se cree que por ofrecer un planteamiento "transgresor" no necesita nada más detrás, el problema es que ni siquiera llegamos a lo de planteamiento transgresor porque en pleno siglo XXI el hecho de mostrar el mundillo LGTBI en pantalla no tiene absolutamente nada de transgresor ni original.

Lo único positivo es que sus capítulos duran 15 minutos así que si le dais una oportunidad podréis llegar al final del capítulo sin haber perdido hora y media de vuestra vida. Aun así os recomiendo que empleéis esos 15 minutos en hacer algo más gratificante como puede ser pasar ese cuarto de hora mirando a la pared.

Hace unas semanas se estrenó el Flooxer (plataforma que recoge la basura de este país que no quieren en la televisión, como algunos experimentos mediocres de youtubers, por ejemplo) la serie "Terror y feria", que son seis cortos de 15 minutos cada uno (aproximadamente), dirigidos por Benja de la Rosa (hermano de Secun, el cual, por cierto, protagoniza uno de los cortos), y producidos por los Javis, que, sinceramente, me tienen saturado, y cuya película "La Llamada" me hizo la misma gracia que quedarse atrapado en un ascensor averiado. 

Por los cortos se pasean varias rostros conocidos del cine y la televisión, además de personajes de dudosa reputación como "Soy una pringada", que tiene la misma gracia que una patada en las partes bajas, pero que ahí la tienes, en todos los saleros. Y es que no hay nada mejor en este país que lamer culos, cuanto más famosos mejor.

Pues bien, os confirmo, desde ya, que no recuerdo haber visto algo tan lamentable y mediocre en mucho tiempo, y encima es una pérdida de tiempo sin gracia, y eso que cada episodio son unos 15 minutos, aunque al principio, sale el director echándose flores (como si fuese un genio del género) hablando con famosos más cercanos al salseo y pedantería de este país, que no al verdadero cine. Penoso.

En cuanto a los cortos, cada cual es peor que el anterior (aunque el último no tiene nombre), y no hay nada que rescatar de estas seis historias, que encima se han vendido como una combinación de humor y terror, cuando de lo primero no tiene nada, y de lo segundo es un intento frustrado por aportar algo mínimamente decente, y es que se nota la falta de presupuesto (lo de la muñeca es bochornoso). No sé cuanto dinero habrán aportado los Javis, pero estoy seguro que se ha ido al elenco de "actores", porque a otra cosa...

Y os aseguro que un estudiante de cine entregaría algo muy superior, es más, das esto en una escuela de cine, y creo que te suspenden y te expulsan, porque el nivel roza los infiernos y estoy no hay quien se lo trague. Obviamente, son historias (la mayoría) que denuncian la homofobia y la fama desde el "terror". Muy bien, pero se queda en eso, una declaración de intenciones sin sentido alguno, que juega con la paciencia del espectador, y que intenta hacer un homenaje a la España cañí y folklórica (y que tanto daño hace), pero que se queda en un bodrio olvidable.

En conclusión, no le recomendaría esta idiotez ni a mi peor enemigo, que encima se ha vendido como algo novedoso y fresco, cuando huele a rancio y baratero que echa para atrás. Una pérdida de tiempo que me costará olvidar y que, si por mi fuera, jamás hubiese permitido (como amante del buen cine y del género del verdadero terror) que llegase a los ojos del espectador. Cosas que pasan. Avisados quedáis. 

Más críticas: ocioworld.net

Pues sí, a mí me ha gustado. Pero creo que me gustó, básicamente, porque sé diferenciar cuando algo pretende ser una genialidad del cine o simplemente un entretenimiento.
Aquí veo comentarios supercríticos, pero es que esto, desde su partida, pretende ser absurdo. ¡La culpa es vuestra que no elegís bien lo que veis! jajaja.
Si este tipo de humor no te gusta, no lo empieces, porque va destinado a un público muy concreto.
Yo no me veo un combate de boxeo porque me repele desde el comienzo. Si lo veo, sé de antemano que no me va a gustar. La culpa no es del boxeo, sino mía por no elegir bien. Pues con esto igual.
Ni pretende ser terror ni su objetivo es hacer historia cinematográfica, así que no se le puede exigir a esta serie, lo que no promete en ningún momento.
Tiene humor absurdo, algunos diálogos geniales, un humor muy característico y propio del colectivo, alguna interpretación tan mala que la hace buena (que estoy convencido de que es lo que pretendía De la Rosa), etc.
Pues eso, que es buena en su género.