12:01, testigo del tiempo (TV)

Soy la única persona que conozco que haya visto esta película. Por lo que tengo entendido solo se ha emitido una vez en España, en torno a 2001 creo recordar.Se rodó en fechas cercanas a "El día de la marmota", aunque esta película me parece mucho más original, podemos decir que estamos ante un cómic. Tiene situaciones muy divertidas, acción-reacción, algo así como una partida de ajedrez. Martin Landau es la cara más conocida de esta producción. Un ejemplo de cómo un telefilme puede estar a la altura de la mejor de las películas

Realizada para la televisión el mismo año que vio la luz Atrapado en el tiempo, película protagonizada por Bill Murray, en la que un hombre vivía una y otra vez el día de la marmota.

El argumento de Testigo del tiempo, presenta numerosas similitudes con la mencionada Atrapado en el tiempo, solo que en esta ocasión, hay un crimen de por medio que el protagonista vivirá una y otra vez, para intentar solucionarlo.

La película ofrece suspense, una pequeña historia de amor y todo ello con pequeñas dosis de ciencia ficción, acompañadas por un tono de humor ligero.

Se apoya en la reiteración de situaciones vividas en un día para ir reconstruyendo los hechos que acontecen al fatídico crimen.

Va mostrando paulatinamente nuevos hallazgos y pruebas, que irán conduciendo al protagonista y al propio espectador, en una trama de misterio con satisfactorios giros de guión.

A pesar de tener la temática del tiempo y la reiteración del mismo, el argumento resulta fácil de seguir y no se complica en exceso.

El hecho de apoyarse en las reiteraciones sucesivas de los hechos ocurridos, podría suponer algo monótono y pesado, pero el director logra mantener el interés, a base de pequeñas variaciones y al sentido del humor que acompaña a la trama en todo momento.

La trama toca muchos géneros, como la ciencia ficción, el misterio y el amor, logrando ofrecer un equilibrio adecuado.

Sin ser una gran producción, logra entretener y mantener el interés a lo largo de toda su duración.

Los efectos especiales no son nada del otro mundo, pero cumplen su función. En las tradicionales persecuciones de coches, se hacen patentes las limitaciones de presupuesto, resultando pobres en su conjunto.

No cuenta con grandes interpretaciones, pero hay que decir que el reparto cumple con solvencia, destacando la participación de Martin Landau.

Sin ser una obra maestra y a pesar de poder ser acusada de ser una burda imitación de Atrapado en el tiempo, ofrece un argumento sólido que consigue mantener el interés en todo momento e incluir dosis de misterio, amor y humor.

Película de presupuesto modesto pero un guión sólido a la que tengo un gran cariño y que, tal y como se comenta en otra crítica, a veces creo que soy la única persona que conoce.

El argumento recuerda al de "Atrapado en el tiempo" pero desde un punto de vista policiaco, un misterio que hay que desentrañar y con ello, llegar al final de bucle.

Esto le concede muchos puntos extra, ya que no se trata tan solo de "ser mejor persona" o "un mago lo hizo", sino de un cambio posible que se encuentra en manos de nuestro protagonista.

Es una pena que sea tan desconocida porque merece la pena y, tengo la impresión, sirvió de inspiración a la mucho más reciente "Boss Level" que, a diferencia de esta, disfruta de un gran presupuesto y está mucho más orientada hacia la acción.

155/15(13/22) Fallido e insulso este telefilm para la Fox (y se nota mucho), dirigido por el especialista en ciencia ficción serie b Jack Sholder, que tuvo la mala suerte de estrenarse justo después de la Obra Maestra “Ground hog Day” (1993), partiendo de una premisa similar, sobre un bucle en el tiempo de un día. Aunque luego el desarrollo es distinto, mientras en la protagonizada por Bill Murray era una comedia romántica que no se metía en dar una explicación al elemento fantástico, esta que me ocupa es un thriller de misterio y crímenes, ambiciones de un manido ‘Mad Doctor’ (el clásico que juega a ser Dios), donde se nos da una explicación al porqué de la repetición diaria, aunque demuestra que a veces menos es más, en el sentido que en la dirigida por Ramis el que no te lo cuenten potencia la magia, en esta es un batiburrillo de ideas tontunas. Aunque no lo parezca, esta no es una copia de la ‘marmotiana’, pues el guionista Jonathan Heap siempre dijo que le habían robado la idea, con el incontestable argumento, de que esta película se basa en su homónimo propio guión de un corto (25 minutos) de 1990 (dirigido por Richard Lupoff), tres años anterior a “Grondhog Day” (nominado al Oscar), tanto fue así que denunció a los productores de este famoso film, pero sin éxito.

Esta es una peliculilla que a pesar de su potente proposición, no saben darle sustancia, cayendo en lo simplista, en la falta de ideas para atrapar al espectador, con un sentido del humor bastante pobre, con unos giros bastante débiles, con un ritmo que sin ser lento, al no aportar chicha se va diluyendo el interés, aderezado por unas actuaciones y caracterizaciones de la pareja protagonista Jonathan Silverman & Helen Slater bastante insulsos, solo aportan algo de sabor el gran Martin Landau y el eterno Ari (de la serie “The Entourage”), Jeremy Piven: Donde la tensión resulta entre escasa y nula, pues siempre sabes que todo lo malo se soluciona tras las 00:00, al repetirse el día. Una cinta que se va diluyendo como un azucarillo sin poder engancharte, hasta desembocar en un final muy previsible y sin fuerza emocional alguna. Lo de la idea de que todos vivimos en un bucle temporal del que esperamos escapar con algo que nos remueva resulta aquí manejado de forma huera de contenido.