Everwood (Serie de TV)

Preciosa serie que derrocha calidad, emoción, sentimientos, ternura, humor, drama... Con todos los ingredientes que la encumbran hacia las alturas de las mejores series.
Es la historia de la familia Brown. Andy, el padre, uno de los mejores neurocirujanos del país, está tan volcado en su trabajo que tiene olvidada a su familia. Hasta que un día su mujer muere en un accidente y toda la familia se muda a Everwood por una promesa. Andy, que ha abandondado la cirugía, abre una consulta en el pueblo. Poco a poco se van integrando y capítulo a capítulo nos vamos metiendo en las vidas de los protagonistas y sus relaciones con los vecinos, hasta que se dan cuenta de que Everwood se ha convertido en su hogar y ha cambiado definitivamente el rumbo de sus vidas.
Magnífico guión, buenos actores (todos están geniales), maravillosa fotografía, hermosa música, diálogos naturales y atrayentes... Y siempre tratando temas de actualidad, introduciendo dilemas y situaciones cercanas que nos llegan, nos rozan la conciencia y el corazón.
Andy, el médico viudo que sobrelleva lo mejor que puede la ausencia de su mujer y trata de acercarse más a sus hijos; Ephram, el hijo adolescente que se siente perdido tras la muerte de su madre y no se lleva bien con su padre, y que al llegar a Everwood se enamora de Amy Abbott, la chica de sus sueños; Delia, la hija pequeña, madura para su edad y comprensiva; el doctor Harold Abbott, que rivaliza con Andy; Amy, la hija del médico Abbott, que se convierte en la mejor amiga de Ephram; Bright, el calaverilla hermano de Amy; Nina, vecina de los Brown... Y así todo un conjunto de personajes que van tejiendo una serie de historias conmovedoras.
Una de las escasas series de los últimos años que yo he seguido.

En esta obra de arte, muy diferente de las series que se emiten en la actualidad, Berlanti logra hacer ver al espectador la importancia de valores humanos tales como, la honestidad, la gratitud, la familia, la amistad, el amor, la bondad, el perdón, el respeto, y la solidaridad. También logra hacer ver lo poderosa que puede llegar a ser la herramienta de la comunicación entre las personas.

Después de ver algunos de sus capítulos, se te quedará una sensación de bienestar en el cuerpo que hará que haya valido la pena emplear tu tiempo viendo la serie.

Sin lugar a dudas, una serie necesaria e imprescindible, que puede incluso, que te haga valorar más muchas de las cosas que, por rutina, van dejando de tener relevancia en la vida.

Desde luego, merece ser vista.

Erase una vez una serie ambientada en un pequeño pueblo de la montaña, en sus comienzos gozaba de los mimbres adecuados, una bonita historia de superación, el Doctor Brown se encuentra desbordado por los acontecimientos, a consagrado su vida a su satisfacción personal como cirujano hasta que un revés en el camino aparte de enseñarle humildad y añoranza de lo que tuvo y no aprovecho, le sitúa en la tesitura de criar a sus hijos, unos auténticos desconocidos para el, y que mejor sitio para lograrlo que en Everwood.

La serie tiene sus dosis de drama, comedia, pero sobre todo de ternura en la relación de un padre con sus hijos dolidos por la muerte de su madre, luego vendrán toda una serie de vicisitudes, Evran se hace mayor a los ojos de su padre y se enamora, el chico inadaptado de ciudad tendrá que adaptarse a su nueva vida. Sobre estos dos personajes y una serie de personajes de lo mas amplia y variopinta se sustenta esta serie, que ademas de basarse en las situaciones cotidianas toca temas de un calado mas profundo como son el cáncer, el sida, las relaciones extramatrimoniales, embarazos no deseados.

Es el escenario en el cual los personajes que componen el reparto de la serie exponen sus conflictos y desavenencias.
Puesto que no cuenta con sólo una o dos horas de duración, resulta difícil encontrar en una serie de televisión un producto de calidad perpetua. En una serie es preciso rellenar horas y horas de grabación y el resultado es un producto mucho mas heterogéneo con momentos buenos y no tan buenos.
Everwood no es la excepción que confirma la regla, y tiene sus defectos, pero también sus virtudes y gracias ellas se convierte en algo muy digno de ver.

Como es posible que una serie te haga sentir que formas parte de ella, como es posible que cuando acabe, se vaya algo dentro de ti, como es posible que seas capaz de llorar en cada capítulo. Nunca entendí porque esta serie acabó repentinamente. No es una serie que salga de lo común, a veces es muy idílica, todo sale bien siempre, cada uno acaba con quien tiene que acabar. Pero tiene algo que te hace pensar, que hace que te sientas bien. Es la chica que amas la que representa la serie, es la familia que ves en la serie, es la situación cotidiana la que te emociona. Sabes que eso ocurre, que te ocurre y que les ocurre a los demás. Es Everwood, la serie de mi vida. Tres veces la he visto, tres veces me emocionado con ella y tres veces se ha ido algo de mi con su final.

Foreverwood.