Una cinta que a pesar de contar con buenos actores no alcanza el nivel esperado.
Con la esperanza de encontrar algo de humor negro del bueno me dispuse a ver esta película de Jim Jarmusch. Las espectativas eran altas y muy altas gracias a Bill Murray.
La ambientación es tétrica y está bastante bien conseguida. Los zombies están bien logrados, destacando los dos primeros que salen a escena.
El problema es que ni los zombies dan miedo ni las situaciones y diálogos consiguen atraparte. Y si hablamos del ritmo de la película, es un ritmo cansino y nunca adquiere la velocidad adecuada.
A pesar de todos estos aspectos negativos le doy un 5 porque no me he ido con Morpheo y he aguantado estoicamente sin bajar mis persianas.