Creo que la calidad de esta serie se aproxima a una película y precisamente origina una crítica más dura respecto a la de otras series. La fotografía muy cuidada y se demuestra que el talento debe ser genético. Me ha parecido precioso el contraste de actuación de los hermanos, la cámara se enamora en el primer plano, el primer plano no engaña, requiere de verdad y presencia. Lo que les sobra a ambos. Mario elegante, sobrio, auténtico y Oscar pasión arrolladora, frescura. En la actuación de ambos se deduce mucho trabajo detrás.. Creo que Mario tiene el carisma de actores de Hollywood, me imagino que es una mezcla muy interesante entre Javier Bardem y Antonio Banderas. No es cuestión de belleza, he visto actores y actrices guapísimos y no los aguanto en cámara ni cinco minutos y en primer plano insoportables y tíos buenos desnudos hasta en persona, por lo que no me parece relevante. Seguro que seguirán creciendo como actores y me encantará disfrutarlo.