Antes de verla esperaba ver algo sobre su arte, su forma de pintar, su vida al fin, pero me he encontrado con una película sin argumento, sin pies ni cabeza, basada en las visiones de Gustav Klimt y en una montaña rusa de giros de cámara, guiones imposibles y las ganas de que acabase cuanto antes.

Me ha decepcionado profundamente esta película porque me esperaba mucho más ya que la vida de Klimt es tan apasionante que se merece otra visión sobre su vida.

Me ha decepcionado la última película de Sandra Bullock. Después de "Crash", pensaba que podía hacer algo interesante pero este guión no se sostiene por ningún lado, de tan rebuscado que es al final se le ha ido de las manos al tal Yapo. Los que la hayan visto coincidirán conmigo en que los actores están todos muy flojitos y que el final es decepcionante.

Estamos ante una película interesante en la que el argumento te mantiene en tensión hasta la última escena. Gary Oldman está increíble, un actor con un carácter que inunda la pantalla con su presencia. El resto de actores está en un correcto nivel aunque Paddy Considine no es muy expresivo que digamos.

Es una pena que haya pasado desapercibida porque es una gran película.

VALORACIÓN GENERAL: Liosa. Nunca llego a saber cuál es el argumento de la película.

LO MEJOR: El tren que está guapísimamente decorado.

LO PEOR: El personaje interpretado por Owen Wilson, es pedantísimo.

Esta película es una muy parecida a Jumanji aunque aquí lo que cobra vida son las piezas y objetos del Museo de Historia Natural de Nueva York. Interesante al principio, va perdiendo interés a medida que avanza la historia. Tiene una moralina final que se podían haber evitado.
Está bien para pasar una tarde de domingo en familia, pero poco más.