Después de salir del cine tras ver ésta película me quedé con un sólido mal sabor de boca, pienso que se podría haber explotado mucho más el argumento que nos plantea sobre la devastadora repercusión que puede tener el avance de las tecnologías informáticas en el mundo actual llevando su uso a un caso extremo como el que nos trata de exponer este film.

También desarrolla la idea de que el ser humano vive en un mundo tan artificial y con tanta ambición de poder y ansias de supremacía sobre los demás que por eso no sería tan descabellada la idea de poder desarrollar un espacio virtual donde uno pueda controlar la vida de otra persona.

Es llevar al extremo videojuegos de simulación como los Sim pero sin mucha efectividad cinematográfica.

Otro punto negativo de la película es que en ciertos momentos los movimientos de las escenas de acción son tan bruscos que consecuentemente provocan ciertos mareos en la percepción del espectador.

Me sorprendió la interpretación de Michael C. Hall, su actuación fue buena, aunque le podrían haber sacado mucho más partido. Este actor apunta maneras para el futuro, ya en la pantalla pequeña ha dejado patente su capacidad de interpretación con la serie Dexter, confío en que siga creciendo en futuras actuaciones en el mundo del cine.

Aún así le pongo un cinco, porque Gamer al menos trata de hacer reflexionar al espectador de una manera directa sobre la ética en el uso de las nuevas tecnologías y siempre me arrancan algún que otro punto demás las películas que tratan de hacer algo de crítica social así como lanzar algún mensaje que inste a la reflexión.

También valoro el hecho de no bostezar en ningún momento durante la visión de la película, aunque tampoco tiene mucho mérito, antes de ir al cine dormí la siesta.