Si hablamos de series infantiles actuales nos vienen a la mente: La Patrulla Canina o Pepa Pig, nadie habla de Bluey, y es extraño, porque es, de lejos, la mejor de todas las series infantiles que se han creado. No lo digo yo, es una serie que tiene un 9.7 en IMDB (la nota más alta en toda la web), y desde luego no es por casualidad.

Bluey es una perrita de 6 años que vive con sus padres y su hermana de 4. En cortos episodios, que rondan los 7-8 minutos, nos van contando divertidas historias de su vida, de una manera terriblemente amena y positiva para los niños, pero con una doble lectura para los adultos que hará que en más de una ocasión acabes riendo o llorando. Y es que Bluey te llega en muchos momentos hasta lo más hondo, hasta donde los ojos se humedecen mientras tu boca sonríe, es tal la belleza de algunos episodios que sólo pensarlo se me ponen los pelos de punta.

A nivel educativo, la serie es un no parar del buen hacer. Explica de una manera increíblemente bella y atractiva para los pequeños conceptos como la positividad, el crecer, la familia (todo tipos de familia), el esfuerzo, las recompensas... en definitiva trata las emociones positivas de una manera que ninguna serie infantil se ha atrevido o planteado hacer. Y en cada episodio algo diferente.

Ha sido un total descubrimiento. Sin duda, la obra maestra de las series infantiles.

"Rescate en las profundidades", el nuevo documental disponible en Disney +, nos cuenta la historia del rescate de 12 niños de un equipo de fútbol y su entrenador en 2018 en las profundidades de una cueva de Tailandia. Los niños fueron a celebrar un cumpleaños y empezó a llover, la cueva se inundó y los niños quedaron atrapados a unos 2 kilómetros de la salida.
Nadie, ni el ejército tailandés ni las autoridades locales, sabían qué hacer, así que acudieron a los dos mejores buceadores de cuevas del mundo.

"Rescate en las profundidades" es de esos documentales que erizan la piel. Ya no solo por lo emocionante de la situación en si, una aventura digna de un guión de Hollywood (de hecho se prevé película dirigida por Ron Howard), sino también por ver de lo qué es capaz el ser humano por preservar la vida de otro ser humano, en más de una ocasión acabarás con la lágrima a punto de salir de tu ojo.

Veremos como tipos corrientes, que nada tienen que ver ni con ejércitos, ni con equipos de rescate, tienen que convertir su hobby, bucear el cuevas, en la única esperanza para preservar 13 vidas, vidas que dependerán enteramente de su pericia bajo el agua. Deberán lidiar con mil y una adversidades, no solo de la naturaleza, también de la burocracia de un país, Tailandia, que no está acostumbrado a que extranjeros sean la punta de lanza de su propio ejército de élite.

La parte técnica es muy destacable. La mayoría de metraje es real, tanto en el interior de las cuevas, como bajo el agua. Las imágenes no reales son altamente espectaculares, lo que nos hace ver que detrás de todo hay una producción digna de National Geographic.
Las entrevistas a los protagonistas rezuman verdad y sentimientos a flor de piel, la propia personalidad de los buceadores, tipos con una mentalidad de hierro y no dados a la sensiblería, hace que los momentos más sensibles sean de verdad, sin que el guión busque la lágrima, porque no le hace falta, la propia historia te hará emocionarte.

En definitiva, nos encontramos con uno de los mejores documentales de los últimos años. Una obra que merece ser vista y apreciada como lo que es: una oda al espíritu humano.

Reina Roja ha sido uno de los libros más vendidos en Castellano de los últimos años, Juan Gómez Jurado creó una trilogía muy bién hilada que ha dado para mucho, incluso para algún spin-off basado en el mundo de Reina Roja. No es casualidad el éxito de los libros, Juan Gómez Jurado es una auténtica enciclopedia andante, ha mamado todo lo que se puede mamar del thriller americano, y en eso basa su éxito, ha sabido coger lo mejor de los best-sellers americanos y adaptarlos a la cultura Española. El resultado, literariamente hablando, es espectacular. Y aunque, para mi gusto, Reina Roja no sea lo mejor de la obra del madrileño, se nota que está pensada para una adaptación a formato visual, de echo casi todas sus obras dan para una película o una serie, Juan Gómez Jurado sabe mucho de literatura, pero también de formato audio-visual.

Era de esperar que si obra, tarde o temprano, fuera llevada a ese formato, y aunque a un servidor le hubiera gustado más "El Paciente" (es imposible leer ese libro y no pensar en una película), Reina Roja es su mayor éxito, y por tanto siempre fue la principal candidata.

Reina Roja nos introduce en el mundo de Antonia Scott y Jon Gutiérrez, ella es la persona más inteligente del mundo, es también la Reina Roja, una especie de agente encargada de solucionar los casos más difíciles a los que la policia no puede llegar. Jon Gutiérrez por su parte es un agente de policia, poco típico: gordo, gay, todo corazón, sarcástico... cuya misión será cuidar de Antonia.
Los dos se enfrascan en descubrir quién mató a el hijo de una rica empresaria, y quién ha secuestrado a la hija de uno de los hombres más ricos del mundo, ambos casos ligados.
En 7 episodios descubriremos una trama bastante manida, con dos personajes bastante peculiares.

Y es que Reina Roja no aporta nada nuevo al género del thriller, la trama la hemos visto decenas de veces (por eso pienso que Reina Roja no es, ni de lejos, lo mejor de Juan Góme-Jurado).
La serie empieza bién, hace una buena presentación de personajes (aunque como siempre en estos casos se quedan algunas cosas en el tintero respecto a la vida y personalidad de ambos protagonistas), hace una buena introducción de la trama, dejándonos con ganas de más en los primeros episodios. Pero a medida que avanza la temporada, la serie se desinfla, siendo los últimos capítulos lo peor de la serie. El penúltimo es casi un sin sentido, y la resolución final es bastante mejorable, no a nivel de trama, pués la historia es lo que es, sinó más bién a nivel de diálogos, de mantener la intriga...

En cuanto al elenco cabe destacar que uno de los grandes fallos (si no el más grande) de la serie es Vicky Luengo como Antonia Scott, no me ha parecido, para nada, una gran actuación. Físicamente si que se parece a la Antonia de los libros, pero su manera de actuar no me ha convencido.
Tampoco me ha gustado la elección del actor que hace de "Mentor", para mi eso no es el Mentor de los libros, no tiene nada que ver...
Por otro lado Hovik Keuchkerian es Jon Gutiérrez, es tal y como me lo había imaginado mientras leía los libros. Igual que Nacho Fresneda como Ezequiel.

En definitiva, es una serie que empieza mejor que acaba, entretenida pero mejorable.

La película es mala. No solamente por lo enfermiza de su puesta en escena, eso es lo de menos, Terrifier 2 es mala porque es absurda, el guión es pésimo, es ridículamente larga y los efectos especiales son de principios de los 80 (que dice su director que está hecho así como homenaje... pero no cuela).

Lo único que la salva de un 0 absoluto es que el personaje de Art el payaso tiene su encanto, y da bastante terror (pero no deja de ser un payaso asesino, algo visto mil veces en el cine de terror serie B).

En cuanto a las escenas que "hicieron salirse de las salas a la gente"... bueno, si, la película es gore, con litros de ketchup y desmembramientos por doquier, pero es tan absurdo todo y está tan mal hecho que roza el ridículo, me parece más perturbadoras algunas trampas de Saw, al menos están mejor hechas y son más "realistas".

En cualquier caso, película horrible.

The Office narra, desde un punto de vista de falso documental, el día a día de una oficina de una empresa papelera de Estados Unidos. Encontraremos a los personajes típicos de toda empresa: el pelota, el guaperas, el que pasa de todo, el becario etc Pero sobretodo encontraremos al mejor jefe de la historia de la televisión : Michael Scott (Steve Carel), el jefe que todos quisiéramos tener: comprensivo, con pocas ganas de trabajar, hilarante...

Estamos ante LA SITCOM. A lo largo de 9 temporadas va a dar tiempo para que todos sus secundarios (que son muchos para una sitcom) se desarrollen de una manera magistral, hasta tal punto que sea muy difícil imaginar la serie sin alguno de ellos: todos forman parte esencial de la serie, no son secundarios sin más, todos tienen sus tramas, sus momentos inolvidables y sobretodo: todos están escritos de una manera magistral. Pero es que no hablamos de secundarios de bajo perfil como actores, hablamos de actores y actrices que hoy en día son pesos pesados, algunos con sus propios shows como John Krasinski o Mindy Kaling. En definitiva, la magia de esta serie, es que por mucho que su protagonista, Steve Carel como Michael Scott, sea el que casi siempre lleva el peso del show, es inimaginable la serie sin sus coprotagonistas.

Una de las cosas por la que la serie es lo que es, es el rodarla como falso documental. Las entrevistas en off a los personajes son la guinda a gags o historias, y es que podremos saber de primera mano que piensan realmente las personas, lo que no dicen delante de la gente. Una auténtica genialidad que también aprovecharon otras series como Modern Famlily, pero que en The Office tiene una trascendencia descomunal.


Es increible que cuando se hable de sitcoms siempre se hable de Friends, Dos hombres y Medio, Como conoci a Vuestra madre, Modern Family... pero nunca se suela mencionar a The Office. Al menos en España. Y es una pena porque The Office lo tiene todo y mejor que las otras: tiene una historia de amor perfecta y real, con sus altos y sus bajos, sus cénits románticos; tiene carcajadas, muchas, tiene momentos de lagrimilla... en definitiva, perfecta.

Sólo pido una cosa a quién quiera verla y es que aguante los 6 primeros episodios de la primera temporada. Se notaba que los guionistas no sabían como enfrentarse ante un personaje como Michael Scott, y es precisamente en esos episodios cuando aparece un Michael más exagerado y poco creible, es justo lo contrario que, por ejemplo, lo que pasa con otros personajes de otras series, que tras varias temporadas sus gags se exageran y se hacen poco creibles (como Barnie en Como Conoci a Vuestra Madre o Sheldon en Big Bang Theory), aquí Michael se hace más comedido y realmente más divertido a medida que la serie avanza. Lo mismo ocurre con el resto de personajes. Por eso digo, aguantad esos 6 episodios, de verdad que merece mucho la pena.

En definitiva, nos encontramos antes la mejor sitcom de la historia, que ha sido últimamente la más vista en Netflix USA, gozando de una segunda y merecida juventud. Una auténtica obra maestra. Ah! y sin risas enlatadas. No le hace falta.