ALF narra las aventuras de un extraterrestre que se estrella en la cochera de una familia estadounidense, y ésta lo "adopta" y protege de las Fuerzas Anti Extraterrestres, además de otras personas que podrían verlo y denunciarlo. Lo que podría parecer un fondo de drama al estilo E.T. termina en una de las series más hilarantes de la televisión estadounidense. El extraterrestre, nombrado Alf (Alien Life Form, en clara parodia a E.T.) por la familia Tanner, vive millones de situaciones en su encierro involuntario que terminarán en descacharrantes aventuras.

La serie exprime al máximo todos los detalles grandes y pequeños que se podían obtener de la historia. Además de las vivencias graciosas salidas del hecho de estar escondido, el pequeño alien (además de bajo, peludo y muy comelón) es un decidido desmadre. Tiene facilidad para romper las cosas, participar en accidentes domésticos (como incendios, mencionados en varias veces), espiar a los vecinos para entretenerse (con todo el riesgo de que lo puedan ver), quiere comerse al gato de la familia y prácticamente pone de cabeza la vida de su familia adoptiva.

Además, hay episodios en los que se da tiempo para alguna reflexión no superficial y hasta de ternura. Todo puesto en la mesa para encariñarse inmediatamente con todos los personajes (pues hasta los secundarios rebosan de vida).

Nunca en la vida me he reído tanto como al presenciar (casi vivir) las aventuras y desventuras del melmaciano a lo largo de 102 capítulos. Para mí, un clásico por derecho propio.

La película en sí, es mala. Malas actuaciones, si acaso el Ice Cube y Jonathan Hyde se salvan. La historia es mala, una serpiente gigante comehombres... Pero por alguna razón me entretiene. La anaconda se ve real, tiene ciertos movimientos exagerados pero realmente parece una serpiente de carne y hueso. Como película de terror es un asco, por que sinceramente no da miedo, pero sinceramente, en los últimos 30 años incluso ¿qué película de terror te causa realmente terror?¿O por lo menos inquietud o escalofríos? En conclusión, si quieres entretenerte por 90 minutos y no hay fútbol, pues mírala. Pero no esperes un trabajo bien hecho por que no lo es, en cuanto a actuación por lo menos.

Es una maravilla cómo las cosas pueden concatenarse. Alguna vez, después de leer una reseña sobre Ciudadano Kane (en la que la llamaban "La mejor película de la historia"), se me ocurrió buscar cuál era considerada la peor película. Cuestión de teclearlo en San Google y encontrar a "Plan 9 del espacio exterior". Algunos meses después, después de ver muchas de las películas y empaparme de todo el universo de Ed Wood, supe de la existencia de esta cinta.

Hasta el momento, es una de las mejores biopics que he visto (que no son muchas, eso sí). Maravilloso trabajo del elenco para darle vida a esos personajes que rodearon al director, y a Ed Wood mismo, y vivir de cerca un mundo que me había imaginado varias veces. En general, muestra una faceta notoria en las películas realizadas por Ed: hacer su trabajo con toda la fe y pasión del mundo, a pesar de las evidentes falencias como realizador que tenía. Johnny Depp hace que te rías, reflexiones y conmuevas al ver todas las peripecias por las que tuvo que pasar para continuar su sueño de dirigir(como hacer bautizar a todo el crew de su película para que una iglesia los patrocine). Mención aparte merece Martin Landau (ganó un Óscar por esto) al hilvanar un entrañable Bela Lugosi. La química conseguida entre él y Depp refleja muy bien la amistad que sostenían el actor húngaro con Ed. Sin embargo, es mucho más impresionante su actuación al comparar las escenas de las películas reales con aquellas de esta cinta: los gestos, expresiones y movimientos de Bela y Martin son idénticos en gran cantidad de planos. Bestial interpretación.
Los secundarios son muy difíciles de olvidar pues, además de ser correctamente intepretados, ya eran excéntricos por sí mismos: un luchador sueco, un millonario excéntrico, la presentadora Vampira, actores que formaban parte de la producción, todos incondicionales de Wood.

Por último, quiero explicar el título de esta crítica. Ed Wood dirigiendo hoy sería todo un rockstar. Tendría hordas de fans en todos lados y muy probablemente su vida no hubiese terminado de manera tan triste (murió prácticamente en la indigencia y sin conseguir el éxito). Lo "peor" es que todo el corazón que le ponía a sus obras es el mismo que hoy le falta a la mayoría de las películas en cualquier género.

Perdónanos, Ed.

No soy especialmente fan de los cortometrajes (generalmente me valen madre), así que no estaba muy entusiasmado cuando mi hermano me dijo que viera al asesino más lento con el arma extremadamente ineficiente. Sin embargo, no me arrepiento para nada.

Hilarante, de gran ritmo y novedosa, realmente me la pasé bien con este "tráiler extendido". Primero te gana la risa por ver que un ente persigue a su víctima...a cucharazos. Golpes de cuchara en situaciones no tan oportunas, que se ven inofensivas pero al extenderse se vuelven peligrosas. Se pone preocupante cuando el protagonista no puede vencer al asesino, ni a golpes, ni con armas. En un punto hasta me invadió una sensación de desesperación al ver cómo el protagonista (Jack Cucchiao, nombre perfecto) no consigue escapar del asedio del asesino y su moral y salud van decayendo con el correr de los minutos.
En resumen: reúne una premisa bastante irreal con los elementos de un thriller. Imperdible.

El final, lo mejor.

La historia del asesino del Zodíaco es una de mis favoritas dentro del mundo de los asesinos seriales. Conocido por matar 7 personas y desaparecer sin dejar rastro, es una versión estadounidense de Jack el Destripador.
En más de una ocasión, al leer los relatos e informes del caso hago el ejercicio imaginativo de trasladarme a la época, finales de los años 60, para "mirar" los acontecimientos. Esta película ahorra dicho ejercicio.
Con una dirección competente (abusa de interrumpir planos), David Fincher entrega una película atrapante desde el primer momento, con ese aire antiguo y apoyado por la banda sonora, y nos traslada a los hechos. Los planos de los asesinatos están muy bien construidos y podemos palpar la desesperación de los oficiales y el protagonista al ir a la búsqueda de las pistas que al fin los lleven al paradero del responsable. Se toma su tiempo para construir el caso bajo las visiones de tres personas: el oficial Dave Toschi (interpretado por Mark Ruffalo), el caricaturista Robert Graysmith (Jake Gylenhaal), y todos los demás. Incluidos nosotros.

En general, sabe inducir tensión en algunas escenas pero nunca logra posicionarse como un thriller psicológico. Mantuve el interés en la película por ser un tema que me apasiona, y desde ya la recomiendo como un complemento perfecto a quienes conozcan la historia, pero las personas que no estén familiarizadas con el caso la pueden encontrar pesada y muy larga (dura 157 minutos). Sin embargo, si te dejas atrapar, encontrarás una maravilla sobre uno de los crímenes sin resolver más famosos de la historia.

Ocho estrellas bien puestas.