Captain Marvel (2019)

Ha llegado la vigesimaprimera película del UCM, que tiene como protagonista a la heroína Capitana Marvel, interpretada por Brie Larson. Y el resultado es aceptable.

Al público lector: si gustan de visitar las salas de cines cercanas a su domicilio buscando entretenerse, si son seguidores de los film de súper héroes, si lo que quieren es pasarla bien un rato, sin demasiadas exigencias, y consumir un satisfactorio aperitivo previo a Avengers:EndGame, entonces no duden en ir a conocer la historia de Carol Danvers, también conocida como la Capitana Marvel.

Envuelta en una especie de tornado mediático, plagado de comentarios negativos, y sospechada por algunos por introducir un mensaje fuertemente feminista (¿y si lo hace, qué?) se podría afirmar que Captain Marvel sale bien parada en su presentación.

Brie Larson interpreta correctamente a nuestra heroína, en una historia ubicada en los años ´90 (si, hay referencias a esa década), donde el planeta tierra se ve envuelto en un conflicto entre dos razas alienígenas.

Para quién no conoce la historia de los cómics (como quién escribe) resulta interesante la presentación de quién indudablemente va a jugar un papel súper relevante en la segunda parte de la batalla contra Thanos. Sus secretos, el origen de sus poderes, sus enemigos, sus amigos, todo resulta más o menos nuevo para el lego en asuntos de la capitana.

De desarrollo ameno, el film destaca por la presencia de un joven, genialmente digitalizado, Samuel L. Jackson, interpretando una vez más al conocido y querido Nick Fury. La relación de este último con Carol, y sus momentos juntos en pantalla, funcionan muy bien, y quizá sean los mejores de la película.

El humor, que pareciera ser un elemento que siempre hay que observar en las pelis de Marvel (y si no lo es, es como que uno se ve obligado a hablar de ello), está bastante equilibrado. Es decir que, por suerte para este espectador, no convierte al film en un show de stand up como en otras entregas del UCM.

No hay batallas que destaquen, y de hecho, se ven bastante genéricas y confusas, como bien resaltan la mayoría de las críticas.

Vale agregar que el cameo de Stan es un momento muy tierno. Filmado antes de su fallecimiento, fue editado para generar una suerte de homenaje que conecte con el público. Y creanme que lo logra.

Para concluir. Se ha introducido a la Capitana Marvel al universo UCM. Posiblemente veremos mucho más de ella en el futuro, y EndGame representará una brillante ocasión para mostrarla en todo su esplendor. Veremos como le irá yendo a la gente de Marvel en estos movimientos de cierres de ciclos y aperturas de nuevas historias.

Reseña escrita para Nada Puede Malir Sal - Cine y Series

Muñeca Rusa es una de las nuevas series de #Netflix de este 2019. Varios portales la han catalogado como una de las mejores series que la conocida plataforma de streaming nos ofrecerá este año.

Creada por Leslye Headland, Amy Poehler y Natasha Lyonne (esta última también es su protagonista), esta historia nos relata las aventuras de una joven llamada Nadia Vulvokov que se ve atrapada en un misterioso bucle temporal, que inicia en el baño de su fiesta de cumpleaños número 36. Nadia muere cada vez, y la historia vuelve a arrancar.

Posiblemente muchos piensen inmediatamente en “El día de la marmota”, también conocida como “Hechizo del tiempo”, o “Atrapado en el tiempo”, la reconocida historia protagonizada por Bill Murray que ya es una especie de clásico y cumplió 25 años en 2018.
Russian Doll parte en términos generales de una premisa similar. Aunque a diferencia del film de Harold Ramis, la historia se va poniendo cada vez más seria y no deja de plantear algunas preguntas al espectador dispuesto a hacérselas. Bien se puede ver como mero entretenimiento, y creanme, la van a pasar genial. Pero es casi imposible, y esto en sintonía con la protagonista, evitar desesperarse cada vez más en cada nuevo inicio, en cada insoportable repetición del infinito bucle.

El drama se va apoderando de la pantalla y los secretos comenzarán a revelarse de a poco. Uno podría decir, para que quién no la haya visto no se entere por este medio de los detalles del desarrollo y la resolución, que como decía el buen Freud, el que no recuerda, repite.

La pregunta hay que hacérsela. ¿Acaso no hay personas que viven todos los días como si fuera el mismo? No hay que ser muy erudito para afirmarlo. Muñeca Rusa nos interpela en esta línea, y nos muestra que en cada repetición también hay diferencia. Sí, hay indicios que nos llevan a recordar y despabilarnos, despertarnos del sueño de cierta inercia existencial. Ahora bien, hay que estar dispuestos, atentos, o bien apremiados, para servirse de esta especie de señales que dan cuenta del circuito repetitivo y al mismo tiempo de una suerte de salida.

La serie está muy bien. Una historia muy bien contada (quizás aquí radique su principal virtud), de 8 episodios de aproximadamente 30 minutos cada uno. Es divertida, entretiene, apela al humor negro, y como bien decía anteriormente, no carece de drama. Resalta por su pareja protagonista. Natasha Lyonne está bien, aunque no encontré diferencias con su personaje de “Orange Is The New Black”. De todas formas eso no es algo “malo”, ya que le queda muy bien.

La recomiendo.

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Vivarium es una película que desde la presentación de sus posters muestra una estética muy cuidada y atractiva, sembrando curiosidad por querer saber más sobre ella.
Esta estética se continúa en la cinta que tiene como característica principal una puesta en escena minimalista, encantadora y al servicio de la historia.
Ahora bien, ¿de que va Vivarium? Gemma (Imogen Poots) y Tom (Jesse Eisenberg), son una joven pareja que se ha planteado la compra de su primera casa. Para ello visitan una inmobiliaria donde los recibe un extraño agente de ventas, que les acompaña a Yonder (una nueva, misteriosa y peculiar urbanización donde todas las casas son idénticas), para mostrarles una vivienda unifamiliar para ellos. Y hasta aquí contamos.
Imogen Poots y Jesse Eisenberg realizan un gran papel en una película en donde prácticamente están solos durante la mayor parte de la misma. ¿Terror, suspenso? ¿O quizás ciencia ficción? ¿Un film distópico? Está claro que es difícil de encasillar.
Si gustan de las películas extrañas pero cautivantes y con posibles distintas capas de lectura en relación a la pregunta que solemos hacerle a este tipo de producciones, es decir ¿qué me está diciendo?, entonces no dejen verla.

Reseña escrita para Nada Puede Malir Sal - Cine y series

Tenía ganas de ver una película, y surfeando por Netflix me topé con #Hogar. Leo: thriller, suspenso y lo tengo casi decidido. Nada puede salir sal.
La película española nos cuenta la historia de Javier, que es un ejecutivo publicitario alguna vez exitoso. Pero ya no. Para recuperar lo que alguna vez tuvo decide infiltrarse en la vida de una familia que ahora ocupa su ex y ostentoso departamento. Un psicópata.
Aún siendo en ciertos pasajes algo predecible, la película sabe sostener la tensión de principio a fin. No se van a aburrir. Quizás queden un poco decepcionados, como yo, que me terminé encontrando con una historia que se contó centenas de veces, y no aporta nada sustancial. Imagino aquí que alguien podría objetarme: “ya no hay nada nuevo que contar, ¿que esperabas?”.
Siempre hay otras formas de contarlo, y no faltan producciones que nos sorprenden en este sentido.
Agrego que el personaje como buen psicópata planifica sus movimientos de forma fría y medida. Ahora bien, la ejecución de los mismos dependen de muchísimos factores, que imagino solo pueden sincronizarse en una cinta de estas. Eso le quita verosimilitud y la hace algo inconsistente, cuestiones quizás disimuladas por sus más logradas escenas de suspenso.

Reseña escrita para Nada Puede Malir Sal - Cine y series

Reseña escrita para Nada Puede Malir Sal- Cine y series

Tuve una corazonada y no falló (ah, que original manera de comenzar una reseña, me siento realizado como el pseudo crítico-poeta que nunca seré y prometo no ostentar este honorable título al final del escrito haciendo otra referencia al nombre de la película). La corazonada no era buena. No sé porque y creo que en definitiva de eso se trata cuando de corazonadas hablamos.
Fui presa de un bombardeo visual cada vez que entraba a #Netflix, anunciando el estreno de la primer película argentina producida por la plataforma. Y resistí estoicamente los primeros días hasta que empecé a imaginar que tenía ganas de verla y que podría ser una experiencia interesante.
A decir verdad no me convocaba para nada la presencia de la compatriota Luisana Lopilato, pero mi parteneire cinéfila/seriéfila me endulzó los oídos hablando de las virtudes del Joaco Furriel y Maite Lanata. Y entonces decidí verla intrigado por sus participaciones y por que en definitiva me gustan los policiales, y este era uno de ellos. Algo me entretuvo, eso no lo niego. Me sostuve hasta el final del film no tensionado ni mucho menos, pero si curioso por la resolución del caso.
El resto es muy olvidable. Por demás de olvidable. Pero te lo querés olvidar de tal manera como negando que invertiste tu tiempo en ello que no podés sino recordarlo.
Rescato de esta experiencia de 2 hs la participación de Maite Lanata a quién le creí todo lo que transmitió con su actuación. Y creo, sin saber mucho del tema que la fotografía está buena.
El resto, actuaciones insípidas cuasi robotizadas, como forzadas. Parafraseando a un conocido de por ahí o de por aquí, en algún momento me dió la sensación de que el guionista se dijo a sí mismo: “Haré un estudio de campo, investigaré los lugares más comunes del género policial/suspenso y los colocaré todos en el mismo guión, sí, eso es lo que haré. Y si me es posible, y lo será, colocaré giros forzados y pocos creíbles para resolver la historia”. En fin, una decepción.
Ah, y la historia sigue dos casos completamente independientes uno de otro.
Leí por allí que podría ser un capítulo más largo de CSI, y creo que es una percepción acertada.
Sumó un dato, la peli es una precuela de “Perdida” de 2018, del mismo director, Alejandro Montiel.

Como siempre, es mi experiencia y sobre gustos no hay nada escrito. Si la vieron o la van a ver, luego me cuentan y charlamos en los comentarios.

Calificación: Me llevó a un estado de decepción tal que tuve que ponerme a escribir este texto para tratar de salvar a otros del mismo destino.