360 Juego de destinos es una película que en la primera mitad genera en el espectador una intriga de saber qué sucederá.
Sin embargo conforme pasa el tiempo el guión se hace flojo y aburrido.
A pesar de tener un reparto bastante internacional y prometedor, y que la película está basada en una novela austriaca que en su momento seguramente fue muy audaz, los diálogos echan a perder la excelente y arriesgada fotografía y la sutil música que acompaña a 360 Juego de destinos.
Las historias nunca se entrelazan y en algunas ocasiones no tienen razón de estar presentes, no van a ningún lado! (Ej. chica brasileña y ex presidiario).
Hay diálogos que caen en lo absurdo como por ejemplo, la hermana de la chica que se inicia como prostituta y que espera temerosamente en el parque. Es tímida y está nerviosa, sin embargo osa a preguntar a un desconocido con aspecto de mafioso si se siente bien. Y no solo eso, sino que lo invita a dar un paseo por la ciudad y sube a su coche! Es inverosímil como muchas otras situaciones que suceden a lo largo de la película.
No solo era un privilegio que Fernando Mierelles conocido por “El jardinero fiel”, contara con los ya conocidos Hopkins, Law y Weisz, sino el hecho de tener a figuras como el alemán Moritz Bleibtreu o el francés Jamel Debbouze lo ha desperdiciado para hacer una película con matices de cine independiente pero que al final se queda en un filme en el que se hablan distintos idiomas y que varias pequeñas películas hacen una sin una clara propuesta.