Lo peor en una película es cuando se gusta a sí misma, este filme habla un lenguaje constantemente tedioso, pretende explicarse mediante un estilo sobrio que a mí me parece impostado y que deja al espectador muerto de aburrimiento.
Un lenguaje y una estética no son elementos suficientes para que una película sea buena, hace falta un buen argumento, en éste caso el argumento no deja de ser muy simple, hay un topo en en el servicio de inteligencia británico y hay que encontrarlo. Empezamos a buscarlo y vamos de paso perfilando a los personajes pero qué pasa, que nos recreamos en el lenguaje y en la estética y nos olvidamos del hilo narrativo y ahí es donde la sala ha entrado en el sopor, no suelo irme del cine cuando he pagado más de 7 euros y además ya que estoy aguantando semejante peñazo ni que sea saber quién es el malo, pero vaya, para mi tranquilidad un espectador se ha ido y no me ha hecho sentir tan sólo en mis ideas.
Me parece que un buen principio y, eso sí, una excelente escena final y un no menos excelente reparto(aunque desperdiciado) no justifican ver las dos horas que hay entre ambas escenas.

Ah se me olvidaba, una historia tiene su contexto siempre, aquí es poco concreto en este sentido, aparte del hecho evidente que se desarrolla en plena guerra fría. Así, no tenemos casi ningún referente que nos ayude a concretar. Cierto es que la película se centra en el "drama humano" es decir el hecho de que haya un topo dentro de un grupo, pero me falta algo.

Esta película nos habla de una de las vergüenzas nacionales francesas, la redada de judíos en julio de 1942, su hacinamiento en el velódromo de Invierno de París y su posterior deportación al campo de concentración.
No es en sí más que eso una película histórica, un tema que por cierto también toca la no menos excelente película "La llave de Sarah" y que también es del todo recomendable. La película emociona porque la historia es de por sí increíble, visto desde un punto de vista humano. Aquí lo importante pues es lo que nos cuentan, los límites de la condición humana, la realidad siempre supera la ficción.
Independientemente de la historia a mi lo que me llama la atención es la actitud autocrítica que tienen los franceses con uno de los puntos más negros de su historia, el colaboracionismo con los nazis y su nivel de salvajismo. ¿Os imagináis que por ejemplo en España se hace una peli sobre la construcción del Valle de los Caídos? ¿O sobre las matanzas de Paracuellos o de la Plaza de Toros de Badajoz? Lo veo difícil. Hablar y condenar a la vez el pasado de un pueblo sin peros debe ser un símbolo de madurez democrática, me parece a mi, aquí seguramente alguién se ofendería.

Así pues creo que la peli tiene dos puntos fuertes o motivos por los cuales vale la pena verla. Por la historia que nos cuenta y por lo que representa el hecho de contarla, el sentido autocrítico de un pueblo.

Con una buena película, una buena novela o una buena foto podemos aprender más historia que con algunos libros de historia.