A simple vista, la trama de la película resulta parecer algo simple, pero a medida que se desarrolla propone un trasfondo contundente y una protesta evidente contra la ilegalidad, la corrupción y la discriminación. Tomando como referencia principal que la protagonista es mujer y, además, afrodescendiente, se hace palpable la intención de respaldar la participación de las minorías y el empoderamiento femenino manifiesto en Alicia. Esta película es una oportunidad para echar un vistazo a lo que ocurre tras bambalinas en instituciones estatales y nos muestra una vez mas que la corrupción existe y que se viste de gala.
Superficialmente es una muy buena película para ver en cualquier jornada, contiene escenas bastante emocionantes (y eso que las persecuciones siempre lo son) que resaltan y abarcan prácticamente la totalidad de la película.

Al principio nos muestran a una mujer victimizada por las circunstancias, poco valorada y con una autoestima un tanto débil. Luego vemos al papel del hombre como aferrado al término "PODER" (se viaja a donde el Hombre decida, el día que él decida, en el auto que él decida, se quedan en el lugar que él decida, el tiempo que él decida...)
Tal vez sea el meollo de la Película, pero definitivamente es una historia que expone a la mujer ante condiciones de vulnerabilidad, recordándonos aquello de que la realidad supera a la ficción.
Le doy 5/10 Porque es muy predecible desde el comienzo, los giros no resultan convincentes y el final es un tanto insatisfactorio.

Drama y terror juntos, una combinación ya explorada en otras obras, pero que en esta pretende juntar los géneros sin mezclarlos. A veces se gira argumentativamente sobre el mismo tema, aunque visto desde distintas perspectivas, lo que extrañamente funciona.
El terror me recordó un poco a la historia de THE BABADOOK, un monstruo salido de un libro que no tiene origen y tampoco un objetivo claro. Sin embargo, la claustrofóbica propuesta del autismo encaja, inquietándonos constantemente, despertando aquella amenazadora sensación de impotencia que invita al espectador a querer meterse en la película (o tal vez no).

Evidentemente es imposible abordar esta película sin tener en la mente el ambiente que dejaron las anteriores partes. A mi parecer, resulta demasiado lenta y, aunque los giros argumentales funcionan a veces, dejar cabos sueltos no.
Julia es especial... ¿Por qué?
El grupo de investigación que gira en torno a Samara... ¿Qué pitos toca?, si no aportan más que tiempo en la película.
¿Reencarnación?.
Mejor dicho, simple y llanamente insatisfactoria.

El cine protesta vuele a romperla con una historia que, aunque predecible a veces, me resultó entretenida y sensible, con un tema que sigue siendo actual y con el que mucha gente puede sentirse identificada. En cierta forma, es un llamado de atención contra el abuso a la mujer y el Racismo, siendo este segundo el centro narrativo. Hay escenas bastante irónicas pero que funcionan perfectamente, como la de los caballos, donde vemos al protagonista (negro) acariciar la cabeza de un caballo blanco y luego montándolo, algo que bien podría entenderse como una alegoría a la filosofía del racismo. Por otra parte, alguna vez se habla sobre el hecho de que acariciar la cabeza de un negro supuestamente traía suerte, después de acariciar la cabeza del caballo blanco los acontecimientos resultan totalmente opuestos.
9/10 por lo anterior y por la forma tan sutil de hermosear la figura de la raza negra y emitir un grito de protesta justo.
El final... me dejó con una sensación de ira y tristeza.