A)

La primera vez que la vi, siendo niño, me aburrió. La segunda vez lo entendí: 'Blade Runner' tiene la cadencia exacta. El ritmo no podría ser otro.

B)

Y está compuesta de momentos que ponen la piel de gallina:

- La ciudad. La llamarada reflejada en el ojo. Los paneles de neón.

- La escena de amor entre Deckard y Rachel. La música que la acompaña. La violencia temerosa entre ambos. ¿Por qué estamos aquí? ¿Quiénes somos?

- El inserto del unicornio

- La soledad de Sebastian. Su mirada triste. Sus tiernos muñecos

- Roy Batty matando a su creador. Matando a Dios.

= = =

Y como no, el monólogo final. Para mí, el mejor minuto de la historia del Cine.

Esta es una historia real. Una historia entre el Sr. Western, Tito Clint y mi humilde persona. Y aquí la cuento tal y como ocurrió.

º º º º º º º º º º º

Íbamos el Sr. Western y yo caminando por el desierto, conscientes de que nuestra relación nunca había sido la ideal, ni tampoco la más fiel.

Bastante delicado, el final de el Sr. Western parecía inminente tras las intensas disputas con el valiente y aguerrido Don Spaghetti, por el que siempre había sentido yo cierta simpatía. Ambos caminábamos en silencio esperando un milagro que nos reconciliara. Y el milagro ocurrió...

-P… pe… pero mira Sr. Western. ¡Es Tito Clint!

-SR. WESTERN: Virgen santísima, mi viejo compañero Clint. ¿Qué habría sido de mí sin sus estimables colaboraciones con mi persona?. Aunque el muy *** se pasara al otro bando…

-TITO CLINT: ¿Me ha dicho algo Mr. Western?

-No, no, qué va Tito Clint. Ya sabes que mi amigo está un poco mayor y no sabe muy bien lo que dice. Y bien je, je, ¿Qué le trae por estos lares Clint?

-TITO CLINT: Verán, queridos compañeros. Voy en busca de un último proyecto, el definitivo. Un relato que marcará un antes y un después en el género. Y quién mejor que usted para ello, Sr. Western. Si me permite el atrevimiento, rechazar esta proposición que le hago no tendría perdón (guiño, guiño).

º º º º º º º º º º º

Y así fue. Tito Clint hizo una oferta que el Sr. Western no pudo rechazar. Ambos marcharon dispuestos a realizar la película que me enganchó al género. La salud de el Sr. Western no mejoró y, a día de hoy, sigue bastante fastidiado. Pero ahí sigue, dando guerra.

Y yo, en su bando.

Mi primer encuentro con el cine de Bergman. Una obra realmente exigente e inclasificable, llena de preguntas sin respuesta. Mirada al abismo, amplificación del vacío del ser humano. El silencio ante la farsa. La vida como actuación, como Cine dentro del propio Cine. Portento visual. Excesiva, experimental y desequilibrada, pero demasiado brillante como para ignorarla. Necesito volver a verla.

La noche se desliga totalmente de la realidad cotidiana. Están ellos dos solos, sin que nadie más lo sepa, en una línea temporal llamada Cine.

Los diálogos fluyen. Querrías estar viviendo ese momento, esa conversación

Los espacios son el hogar de esos momentos. Al amanecer quedan vacíos, pero han sido partícipes de un encuentro único.

Han sido partícipes del amor.

Melodrama de aquellos del Sur, empapados en sudor. Una película sobre la incomunicación familiar, sobre dolor que se queda dentro. Homosexualidad reprimida. La huida alcohólica hacia ninguna parte de Newman. El anhelo de empezar a vivir de la Taylor. Crítica a la ambición y al materialismo. Cine de carácter teatral, cine de actores. Sólida y muy buena.