Un producto tiene que estar bien envuelto. La gente que se beneficia de él quiere asegurarse de que los ingresos serán lo más elevados posible. Lo malo es que, cuando se trata de cine, podemos hablar no sólo de un producto, sino de arte. Y, aun cuando no se mire desde el prisma poético, un producto tiene que estar bien hecho desde su base, cosa que atañe a la profesionalidad de sus autores (guionista, director y músico). Eso es lo que le pasa al superhéroe por antonomasia: que ha vuelto, pero se le han olvidado de algunas cosas importantes que quizá se hayan extraviado en su viaje a Krypton.
Es inevitable establecer comparaciones entre la película de Richard Donner y la de Bryan Singer, sobre todo cuando esta última copia hasta la saciedad todo tipo de recursos y diálogos provenientes de la obra fundacional. El guión es mediocre y los actores son insípidos, escogidos más por su físico, pétreo en el caso de Brandon Routh (Superman), que por sus capacidades interpretativas. Tanto ellos como su director son incapaces de hacernos sentir el más leve atisbo de emoción, cosa que resulta incongruente, tratándose más de una película de amor que de acción.
En otras palabras, que, a pesar de las logradas imágenes digitales (la película se grabó con cámaras digitales Génesis), y de la solvente realización de Singer, el conjunto se queda en un nivel anecdótico, soso, muy triste y muy oscuro, respondiendo a la tendencia actual del cine a hacer productos visualmente muy lúcidos, pero que están etalonados (coloreados, para los que no sepan) con un gusto por los ambientes lóbregos y difusos, muy del estilo de Matrix o El señor de los anillos. Hasta el traje del Hombre de Acero tiene un color deprimente con tonos azul oscuro, amarillo oscuro y rojo oscuro, casi granate. Pero, por debajo de todo esto, la lacra del cine actual, de la que hasta Superman se resiente, viene dada por la baja calidad de los guiones, la falta de originalidad y por la escasa frescura y aliento épico que estos desprenden.
Ya no se hacen películas como las de antes.