No se como empezar. No hace falta ni que veáis la película, basta con ver el trailer para enterarte de la trama de esta película, es más la única escena aceptable de este despropósito sale en él. Si nos informamos un poco de lo que es el personaje e historia de Venom cabe destacar que la violencia y la sangre son una base de este, pues en esta película no hay ni una gota explicita de lo que el personaje nos tiene acostumbrados a ver en los cómics. Tom Hardy hace el peor papel de toda su carrera, su aportación se limita a hacer muecas como un estúpido. La relación entre Eddie (Hardy) y Venom es para reír por no llorar, parece una relación amorosa, algo que los guionistas se han sacado de dios sabe que clase de sueño erótico extraño. Los efectos especiales dejan mucho que desear para un presupuesto que nos mantuvo un Hype descomunal desde que se anunció la película. El guión es uno de los peores que he visto, a veces llega a sacarte de la sala de cine y a tener que comprarte la entrada de nuevo... es patético, con escenas mal ordenadas sin ningún tipo de sentido al más puro estilo Zack Snyder en Batman vs Superman, horrible. ¿Hay algo bueno en esta película? Sí, el final y algunas de las escenas del comienzo que parecen ser un destello de lo que podría haber sido una película aceptable del personaje. Desgraciadamente ninguna de las siguientes cintas de este ñordo mal hecho con CGI barato tendrá algo que ver con Spider-Man, cosa que no tiene ningún sentido ya que está es la película de uno de los villanos más emblemáticos del mundo del hombre arácnido.

Por fin, tras todas las apariciones de Logan en los X-men y las decepcionantes dos películas anteriores enfocadas a él, Hugh Jackman ha llegado al Wolverine más creíble jamás visto, con unas interpretaciones maravillosas. Dafne Keen es digna heredera del personaje y una joya en el mundo del espectáculo. Boyd Holbrook hace de perfecto villano y Patrick Stewart nos rompe el corazón. La calificación R en la película está perfectamente aprovechada y James Mangold nos da la historia más dura y visceral de todo el mundo mutante. Si hay algo malo en esta obra maestra, es que contiene algunos errores de continuidad respecto a anteriores entregas. En lo general es la mejor película del mundo de los X-men y el mejor cierre para uno de los "superheroes" más queridos y carismáticos de la historia.

Teniendo probablemente al mejor actor posible para este papel, la película no ha estado a la altura del personaje.
La película dispone de un reparto excepcional, pero aún así no profundiza en ninguno de los personajes. Henry Cavill es probablemente la persona que menos lineas de guión tiene en las dos horas de película, y eso es muy frustrante. La oscuridad que le ha dado Snyder no está mal, pero a quien no le habría gustado una versión del personaje más parecida a la de Christopher Reeve, con más luz, intensidad, guión y menos pesimista. Pero ojo, el toque "dark" no lo queda nada mal, pero en ocasiones parece que estás viendo manchas con ruido. En general muy desaprovechada, profundizando en temas que no hacían falta y no haciéndolo en otros que eran sumamente importantes para que esta película fuese perfecta. La película no está mal, de hecho, si eres fan del personaje y pasas por alto algunos de esos boquetes que contiene, te encantará.