La trama se centra demasiado en la actualidad y casi olvida lo que realmente es el Assasin's creed, que es lo que ocurre dentro del Animus. Los actores protagonistas salvan ligeramente unos personajes bastante vacíos. Pero, a mi me llena de inquietud una cosa, esos otros Assasin que había en el centro de reclusión, ¿qué hacían ahí? Que fuera de cuatro frases enigmáticas no sabemos nada más de ellos. Lo digo por cogerles un poco de cariño antes de que alguien los mate.
No intentan explicar algunas partes de la trama que salvo que hayas jugado a algunos de los videojuegos, no vas a entender.
En definitiva, te queda la sensación de una película amorfa, irregular, con algunos momentos entretenidos pero un conjunto tan árida como la arena del desierto que supuestamente ronda por Granada y Sevilla constantemente, según el filme.

Las luces de Navidad con el abecedario, los gofres de Once o el acento de Dustin son ya iconos claramente reconocibles de esta serie. Si te gusta la estética de los 80, la fantasía, la ciencia ficción y los juegos de rol, esta es tu serie.