Cuando uno vislumbra la primera escena en la calle uno no se imagina que todo va a transcurrir en un único escenario, como si fuera una obra teatral.
El genial Alfred nos desvela desde el primer minuto el misterio pero no por ello pierde la cinta interés. Obra destacable del director inglés aunque no para ser enmarcada en la categoría de obra maestra como otras películas míticas suyas (Encadenados-La ventana indiscreta-Con la muerte en los talones-Vértigo-Psicosis)

Puntos fuertes de la película:
- Interpretación fantástica de Jimmy. Primera colaboración entre James Stewart y el mago del suspense que repetirían en 3 ocasiones más.
- Atrevimiento por parte del director británico de dejar caer que ambos amigos eran homosexuales, tema ciertamente controvertido en la sociedad de los 40.
- Película con actuaciones bastante creíbles por lo general.
- Hitch quiso rodar la película en una sola secuencia, pero las imposibilidades técnica de la época le impidieron alcanzar su objetivo inicial. La película se rodó en tomas de diez minutos (cantidad máxima de película que cabía en una cámara cinematográfica), y Hitchcock consiguió darle una sensación de continuidad haciendo un zoom a las espaldas de uno de los personajes y enlazar la siguiente toma con un zoom inverso. Gran atrevimiento en una técnica novedosa para la época que hoy es habitual en ciertas series y directores.

Puntos débiles de la película:
- Actuación un poco inconsistente de Farley Granger que parece un alma excesivamente atormentada. El papel de Granger pudo haber recaído en manos de Montgomery Clift, el cual declinó quizá por riesgo a exhibir de manera notoria su condición bisexual al puritano público americano de la época.
- Algunas escenas pueden parecen previsibles.

Se trata de una película que merece la pena ver y escuchar con atención y más tratándose de una obra del gran artista británico que siempre nos deja muestras de su genialidad.