A pesar de unos efectos especiales un tanto cutres, parecía interesante en los primeros episodios. Lástima que según pasan episodios, los guionistas meten con calzador dudas, desconfianzas, secretos... de los que me temo que, cuando se desvelen, si se desvelan, serán nimios, absurdos y sin sentido.

No está mal como entretenimiento, pero es un producto más derivado del movimiento woke, es decir, coger clásicos de siempre, películas o series anteriores y cambiarlas la raza o el sexo del protagonista y ponerlos en una época en la que no tenían el más mínimo protagonismo. Poco original justo por eso, me recuerda mucho a otras producciones con solo cambiar la raza y el sexo de sus protagonistas. ¿Un doctor Watson de color? ¿En una época en la que todavía apenas si podían estudiar? Es parecido al caso de una Ana Bolena o Cleopatra de color... una locura total.
Creo que se pueden tener ideas woke sin necesidad de estos remakes chapuceros. Ejemplo: Agente Stone, una especie de Misión Imposible pero con personalidad y matices propios que la separan de aquella y, al margen de que guste o no, solo tiene en común que es una película de espías.

P.D.: Me mata que pongan a todo un Duque de Winchester de color, una familia noble de Inglaterra originaria del siglo XII aproximadamente... ¿de color?

Esto raya lo absurdo y del despropósito.

Comienza muy bien, aunque la trama está muy vista, tiene aspectos originales y es bien llevada. Eso si, hasta el capítulo 6 o 7.
A partir de aquí creo que forzaron un montón de situaciones, sin necesidad y cometiendo algunos agujeros de guión importantes, para hacer un episodio más.

Interesante. Lenta en momentos. Atractiva, aunque creo que le falta un poco de punch. Luis Tosar, como siempre, muy notable. Guillermo Toledo, bueno, para mí no ha estado mal, teniendo en cuenta lo pobre de sus interpretaciones en general. El resto de elenco, aceptable.

Buena para ver y pasar un rato entretenido, apetece verla hasta el final, pero no pasará a la historia de las series.