Una grata sorpresa.

Divertida, entretenida, amena y todas esas cosas. El dúo de actores es genial, sobre todo la chavala. Hay situaciones cómicas muy buenas y la historia tiene su miga aunque, para mi gusto, quizás se enrede demasiado en los capítulos finales. Quizás es el único pero que le pondría.

Vamos, que merece la pena verla.

Odio las historias con fallos de guion. Personajes que se enteran de las cosas sin saber cómo lo han hecho, situaciones poco creíbles y ese tipo de cosas.

Si bien aquí el desencadenante de la trama principal es un pelín forzado, se perdona.

La historia está cuidada hasta el más mínimo detalle. Todo encaja a la perfección.

Mola ver como los policías van avanzando en la investigación, encontrando pruebas y resolviendo el puzzle.

Piniculón.

Siempre me han gustado las pelis con crítica social. Es lo que tiene ser un rojo ácrata y piojoso.

Si bien considero que muchas pelis de Buñuel son difíciles (por lo menos para una mente simple como la mía) esta no es el caso. La historia, no por vieja, deja de tener su relevancia en la actualidad: la pobreza genera delincuencia y convierte a los pobres, en este caso niños, en víctimas y verdugos.

Es lo que hay. Podremos ser muy modernos con nuestra tecnología pero seguimos siendo el mismo bicho que salió de África hace miles de años. Y claro, ante los mismos problemas nos comportamos de la misma manera.

No me voy a extender demasiado. Simplemente es una peli que hay que ver (o por lo menos intentarlo).

La primera vez que la vi fue en una excursión a la nieve con los compañeros del equipo de fútbol y nuestros viejos. Parece ser que no se podían ver pelis en el autobús por eso del copyright pero dio igual.

Hay quien dice que el cómic mola más. No lo sé, no lo he leído. Da igual. Tiene momentos surrealistas muy guapos con los que te partes si te gusta ese tipo de humor. Además los personajes son algo así como entrañables.

En estos tiempos de autocensura por culpa de lo políticamente correcto y con ofendiditos agazapados en cada esquina, dudo que se hiciese una peli tan gamberra como esta. Es lo que tiene confundir el humor con la realidad.

Lo digo por un personaje que aparece, no recuerdo cual, que se parece mucho en el aspecto al de DiCaprio en Django. Si además le añadimos lo de las peleas de mandingos...

La peli es bruta de cojones y creo recordar que está basada en un libro. La historia es muy interesante y refleja las bajezas morales de la época. Todos sabemos lo chungo que tuvo que ser para los negros esa época, pero aún así hay cosas que me sorprendieron.

Por resaltar algo en especial, me gusta el personaje del prota blanco, el hijo del dueño de la plantación, que pese a ser más abierto de mente que su viejo no dejaba de ser otro degenerado. Eso sí, en versión light, sin azúcar.