Si podemos tener alguna esperanza de que Halo pueda convertirse en todo un fenómeno cinematográfico es gracias a esta miniserie, convertida ahora en película uniendo sus cinco episodios sin que notemos los cortes.
El presupuesto tan corto era una limitación, pero aún así y contra todo pronóstico han salido airosos, consiguiendo un producto de ciencia ficción bastante decente. Dejando claro que quieren ofrecer entretenimiento sin grandes pretensiones.

La película así se divide en dos partes, una primera bastante convencional, donde nos muestran el entrenamiento de los cadetes que sueñan con ser marines, personajes tópicos con sus problemas personales y amorosos, pero que al final logran simpatizar con el espectador. Y una segunda parte más enfocada a la acción, donde se guardan el grueso de los efectos visuales, que sin llegar al nivel top de la industria cumplen con nota.
La banda sonora se deja notar en los momentos de más emoción, sin faltar escenas de suspense o sorpresas para los fans de Halo.

En definitiva, da lo que promete, que la hora casi y media que dura se pase volando, con una buena recreación, superando las expectativas de ambientación y efectos visuales que teníamos al conocer ese presupuesto tan bajo. Para mí, han conseguido mucho con muy poco.

Lo mejor: Muy entretenida, ambientación y efectos tratados con esmero, la banda sonora en momentos puntuales y la última media hora, un regalo para los fans.

Lo peor: Tarda un pelín en arrancar, con un guión que chirría en ciertos momentos. Ha faltado arriesgar un poco más.

Si lo sé, me encanta fijarme en las interpretaciones de los actores, ya que es lo que le da vida a una película, y piratas del Caribe, sin ser una obra maestra, tiene todo lo que un film desea, un actor en estado de gracia. Jhonny Deep interpreta al carismático capitán Jack Sparrow, digno de un óscar en este film nunca he llegado a entender porque no ha recibido los elogios que merece por este personaje. A él le acompañan Orlando Bloom y Keira Knightley (con unas actuaciones algo flojas) aunque menos mal que para intepretar a Barbosa fueron inteligentes y contrataron a uno de los mejores actores de su generación, el genial intérprete australiano Geoffrey Rush, que clava sin aparente esfuerzo al feroz y cruel capitán. Con ellos viviremos una de las mejores historias de aventuras jamás contadas, con increíbles batallas navales, gran banda sonora para las escenas de acción, y un guión con el que no te aburrirás. Asi que recuerda, arrasa con lo que veas… ¡y generoso no seas¡

Estamos ante la mejor película de superhéroes jamás hecha, una obra maestra del cine que todo el mundo debería ver. Nolán, de nuevo, lo ha vuelto a conseguir, ha conseguido que una película de mas de dos horas y media se nos haga corta, y que lo único que no deseamos es que termine, queremos ver más... Por sus diálogos, su fotografía, sus escenas de acción, por no ser nada previsible, y por su puesto, por la gran actuación de Ledger como el joker, el caballero oscuro merece un hueco en la historia del cine. Y hablando del joker, que en un principio hizo recelar al propio Jack Nicholson, hoy por hoy, resulta ser sin duda ya el mejor de todos los tiempos. Una lástima que su actor, no nos pueda deleitar nunca más con una interpretación. Además, el resto del reparto no se queda atrás en ningún momento. Batman, es decir, Christian Bale, sigue en su línea, en la línea general del filme. Con un argumento más oscuro, el film se merece todos y cada uno de los dólares que se ha llevado en las taquillas de todo el mundo y tal vez fuera digno merecedor de algún que otro oscar.

Paranormal Activity se sale del género de las películas de "susto fácil" para ofrecernos una experiencia de terror única, desarrollándose de tal manera que el miedo va entrando poco a poco en el cuerpo del espectador, e incidiendo en los miedos más básicos que la mayoría de las películas de terror no saben mostrar.

Te aterrará si eres de los que prefiere el miedo psicológico, el temor a lo que no se ve, y estás cansado de espejos que reflejan muertos y sustos de diseño. Es cine de “realismo en primera persona”, cámara en mano, y con efectos muy limitados. Hay gente que dice que “no pasa nada en casi toda la película”. ¿Comparado con qué? ¿Con asesinos que persiguen adolescentes?

Ninguna tortura, por brutal que sea, puede competir contra un inesperado ruido de madrugada o una luz encendida al fondo del pasillo, y eso es lo que consigue paranormal.

Es fácil simpatizar con los protagonistas, una pareja normal, como tú y como yo, está bien que no aparezca la típica tía buena que se tropieza al huir del asesino, o una familia trasladándose a una casa encantada, ni almas en pena con necesidad de ser liberadas de un pasado oscuro. Tan sólo una pareja corriente, que graba sus pequeñeces cotidianas en vídeo, con la excusa de captar fenómenos extraños.

Respecto a la trama poco voy a decir de ella, porque poco hay que contar y no quiero desvelar nada. Es la forma en la que el director conduce al espectador hacia temores cotidianos lo que lleva a contener la respiración en cada escena nocturna, a la espera de lo aterrador. Porque ¿Quién no ha sentido un escalofrío al ver una cortina en movimiento o una puerta cerrarse de golpe tras una corriente de aire? Es la ausencia (aparente) de efectos especiales lo que produce el nerviosismo. Ese ruido de pasos, ¿lo hemos soñado? Ese crujido ¿Es alguien caminando por el techo?

Una de las mejores películas de terror de la historia, con escenas impactantes que nos darán la vuelta al corazón. Realmente aterradora.