Éste es uno de los numerosos engendros que tanto abundan en el panorama cinematográfico español. Lamentable que desde los organismos públicos que subvencionan estas basuras se fomente el consumo de coca y otras drogas como si tal cosa.
Entre risotadas y compadreo propio de mentes enfermas se incide todo el tiempo en la relación directa de juventud-alcohol.drogas y sexo.
Ya resulta lamentable que aparezcan escenas de dos chicas y dos chicos esnifando coca y otra tipa dándole con el mechero a la piedra de droga.
Un espectáculo intolerable y apoyado por la administración que tanto dice hacer por evitar el consumo y tráfico de drogas.

Pesada, larga y tediosa cinta. Declive lamentable de Meryl Streep.
Una historia mal tejida, que por momentos se vuelve repetitiva y aburrida y que al final si que te deja la duda sobre si las ideas se han acabado para muchos y ya sólo queda recurrir al remake.
Morfeo está presente en este filme y deja su huella en el espectador que no puede evitar dar cabezadas hasta que se acaba de desinflar la historieta.

Tom Cruise, sencillamente nefasto, ya no sólo para narrar en primera persona este trozo apasionante de la historia reciente, sino porque artísticamente es lamentable.
Nadie se puede creer a este personaje y menos en la piel de Claus von Stauffenberg.
No me extraña que los familiares se opusieran a que el de la secta de la cienciología destrozara la memoria de Von Stauffenberg.
El parecido físico no importa cuando delante de la cámara se pone un pésimo actor de tres al cuarto.

Se juntan las pretensiones y la paranoia de un viejo millonario que se monta su parque de dinosaurios con la repelencia de unos niños odiosos a los que uno desea que se los coman en todo momento.
La protagonista, grosera, hembrista, feminoide y repulsiva, un bobo bastante chulo y un tipo con aspecto de Indiana Jones.
Un pestiño hecho para niños o palomiteros de tarde de sábado.
Mala de solemnidad.

Niña que cambia de ciudad y de instituto y después de un día decide que no se adapta.
Constante ridiculización del hombre y el recurrente pensamiento futbolero.
Los homnipresente personajes femeninos que manejan el cotarro y son listos e inteligentes, mientras tanto el sentimiento del miedo es bobo y torpe y el de la furia un ser masculino embrutecido y sin control.
La alegría dirige todo y es la que manda junto a un ser odioso gordo y con gafas que es la tristeza.
Chistes ridiculizando al hombre hacen gracia, si hubiera sido al reves la película ni se hubiera estrenado.
Penosa manipulación sobre la adolescencia y los recuerdos y sentimientos.