La peli comienza de puta madre; la pinta de loco de Vinnie Jones es un punto y el misterio que va desprendiendo. La premisa era de primera. No le doy más puntuación porque opino que la película se podía haber explotado mucho mejor, teniendo a Vinnie Jones como al perfecto psicópata siniestro y al guaperas de Bradley Cooper como al curioso incauto. También no se escatima en carnicería al más puro estilo fatality Mortal Kombat; de hecho, si eres algo escrupuloso, no la veas y te ahorras la vomitona. En todo caso, buenos efectos especiales y genial interpretación de Vinnie Jones. Lo único que me queda la impresión de que se le podía haber sacado más partido, al final se hacen la picha un lío; aunque la escena final del todo reconozco que tiene su gracia.

No me malinterpreten, la peli es buena y fluye bien. Lo único que quizá no sea muy original y es previsible. Lo cierto es que la droga no entiende de clases sociales y aquí tenemos a un niñato pijo que va desciendo al pozo; quizá ese descenso tan profundo a los abismo se dé más en los EEUU, en España se dio más en los años 80 y 90; hoy en día es más excepcional. El actor principal, el chico drogata, es el que mejor actúa de la peli; encaja bien en su papel. Steve Carell como padre abnegado, correcto.
En todo caso, la droga (alcohol incluido) es posiblemente el factor principal de muerte de los jóvenes (directa o indirectamente) y esta peli aborda el tema profesionalmente.

Vi esta peli por casualidad hace poco y no sé dónde se había metido esta peli. El argumento denota influencias tarantinianas con ese toque violento y de matanza múltiple aderezado con un sentido del humor propio de la época. Las situaciones son surrealistas, pero molan; Dafoe genial como siempre. El argumento es enrevesado, pero con momentos francamente épicos, y el típico de tomarse la justicia por su mano, la mano de Dios en este caso. Recomendable, aunque si no te gusta la violencia en las pelis, ni de coña la veas.

Si nos atenemos a la interpretación de Cristian Bale, habría que dar un 9 a la película. Está esquelético (perdió ni se sabe cuantos kilos para el papel) y está paranoico perdido (al rebufo de American Psycho); o quizá no actúe... En todo caso, es un gran actor; loco, pero un gran actor.
En cambio, el argumento es bastante pobre; al principio la peli prometía, pero la segunda parte y el final decae notablemente dando como resultado un final decepcionante. Vaya rayada tiene el hombre con el calvo de la sonrisa blanca... Bueno, al final la peli se hace un tanto tediosa, pero merece la pena ver la interpretación siniestra y de locura de Bale.

No cabe duda de que la mafia ha dado películas de todo tipo y de todas las nacionalidades; de hecho, no hay mafia (o asociación criminal) que no haya sido representada en una película (o más bien varias... O cientos).
En esta se representa a la mafia irlandesa, en Cleveland, y su choque con la histórica y poderosa italoamericana (que eran los que manejaban el cotarro hasta los finales años 70).
La actuación del protagonista principal es correcta, pero creo que la de D'Onofrio y Val Kilmer es más superior, y por supuesto; aparece el maestro Walken como no podía ser de otro modo.
El mayor activo es que recrea muy bien lo que fue un momento histórico, la guerra entre bandas criminales en el Cleveland de los años 70. Mantiene muy bien el ritmo y el interés.