Solo aquellas personas que tengan la suerte de tener un perro en su familia podrán captar al 100% la esencia de este film. Para aquellas personas que no tienen esa suerte, les pego una cita que aparece en la película, y que quizás les haga comprenderlo:

"Un perro no sabría que hace con un coche de lujo, o una casa, o con ropa de diseño. Se conforma con un palo empapado. A un perro no le importa si eres rico o pobre, listo o bobo, inteligente o tonto. Si le das tu corazón te entregará el suyo. De cuanta gente podrías decir eso? ¿Cuanta gente puede hacerte sentir excepcional, puro y especial? ¿Cuanta gente puede hacerte sentir extraordinario?"


Dicho esto, decir que "Marley & Me" no es la típica película de travesuras de un perro. Es una película que relata un tramo de la vida de un columnista junto a su perro, en el que crece, madura y forma una familia con el paso de los años.

La película es entretenida, de ritmo ágil, divertida y muy tierna. Con buenas interpretaciones de Wilson y Aniston.

La banda sonora que acompaña a la película es extraordinaria, y forma junto a las imágenes una simbiosis perfecta, sobretodo al final.

Todos sabemos que hacer reír a la gente es una de las cosas más difíciles que hay. Pues bien, Friends lo consigue capítulo tras capítulo durante 10 temporadas, la cual cosa tiene aún mucho más mérito. Pero decir que Friends solamente es humor sería injusto, es mucho más que eso.

Los personajes, simplemente brillantes, extraordinarios. Sin duda, buena parte del éxito de esta serie radica en ellos. Cada uno, con una personalidad muy particular, pero todos divertidos. Es inevitable acabar sintiéndose identificado con alguno de ellos.

Los decorados, entrañables, el Central Perk, el piso de Mónica, el de Chandler, el rellano; te hacen sentir como en tu propia casa. Y las melodías entre escenas la guinda perfecta.

Excelente serie, 100% Recomendable.

Avatar es una pelicula diferente a lo que estamos acostumbrados a ver. El que se disponga a ver Avatar por su historia se estará equivocando de entrada, al igual que el que se equivoca cuando se dispone a ver un drama con la intención de reírse un rato.

Y digo que es diferente a lo común, porque es una película hecha para el deleite y disfrute de la vista. El entorno gráfico de Avatar solo se puede definir de una manera: "Arte en movimiento" o más bien "Obra maestra de arte en movimiento"

Descubrir Pandora es una experiencia visual única, difícilmente olvidable si se ha hecho sentado en la butaca de un cine y con unas gafas 3D. Las combinaciones de colores, las formas que adopta la naturaleza, las luces y los brillos, los tonos, los matices, incluso la rara fauna de Pandora resultan fascinantes y placenteras de observar.

Creo que con esta película se ha definido una nueva manera de ver cine. Un cine en el que se disfruta (con la boca abierta) de las imágenes que se ofrecen, sin tener que calentarse la cabeza con una trama enrevesada, o con giros de guión.

Pues eso, pese a que han habido un par de cosas que me han hecho gracia (pero no la suficiente como para hacer reírme) tengo que valorar esta película como de "Muy Mala".

Y la razón, pues que se me ha hecho tan larga, tan pesada, tan inacabable, tan sin sentido... Que no aguantaba más y la he tenido que quitar sin haber llegado al final. En una palabra: Insoportable.

Mi conclusión: Con el contenido que ofrece, se hubieran podido hacer unos cuantos sketchs de humor para algún programa de televisión, pero nunca una película.

Una película donde contrasta su brillante inicio, con su horrible final. El final es comparable a la típica situación de "se depierta el protagonista y todo era un sueño", que te entra hasta rabia y piensas "Para esto me he tirado más de 2 horas viendo la pelicula? Si lo llego a saber no la veo".

Además, molesta mucho porque el principio de la historia es muy bueno, te engancha enseguida, te intriga, te mantiene expectante, te hace sentir necesidad de saber la explicación de lo que está ocurriendo, pero total para que...

A destacar la impresionante escena del avión. Refleja perfectamente el desgarrador horror de los primeros instantes de después de una catástrofe.