La verdad es que la película en sí no es gran cosa. Simple, sin grandes interpretaciones ni giros inesperados que te hagan estar permanentemente atento. El hecho de que desde el primcipio se sepa cómo termina todo, hace que se pueda disfrutar de otras cosas, realmente valorables. Entre otras, especialmente la cadencia con la que transcurre la película. Me encantó cómo, sin pecar en lentitud, el director se para en momentos geniales, en los que, especialmente por parte de Angel de Andrés, las caras y los gestos de los protagonistas cuentan más que otras muchas películas enteras. He disfrutado un montón con cada escena de ella. La ambientación de la película es buena, aunque en ciertos momentos se cae en estereotipos rancios, pero en general la película me gustó. Es de esas películas en las que más allá de la trama, merece la pena disfrutar de todo lo que pasa en cada momento, como si fuesen muchas películas juntas.

Película 100% recomendable para todo el mundo. Fina ironía y humor negro a saco en una película en la que Pepe Isbert sólo le faltó dar la vuelta al ruedo. Clase magistral de cómo representar una historia muy compleja (mucha carga emocional entreverada) con cuatro duros. Ole por Berlanga y por Pepe Isbert. Jose Luis López Vázquez sobreactúa un pelín, pero tampoco queda mal como contrapunto exagerado al resto de personajes.

Para muchos la mejor de la trilogía; yo creo que es un poco peor que la segunda parte. En medio de una civilización a medio camino de la deshumanización, un policía se empeña en vengar la muerte de su mujer y su hija. Historia original, poco previsible, con escenas trepidantes, escenarios apocalípticos, personajes secundarios con poco protagonismo pero en gran cantidad. Y sobre todo la figura de Max, que da otra dimensión a todo lo que ocurre. Lo mejor, la contínua sensación de angustia que se transmite aun no habiendo nada que lo provoque, salvo asfalto y arena. Afinando la flauta para la segunda parte.

Obra maestra de los westerns modernos. Cuenta una historia típica de la época pero alejada de los tópicos que tanto mal hicieron a este género. Excelente la banda sonora, los paisajes perfectamente cogidos en los amplios planos panorámicos, un amplio reparto repleto de personajes interesantes, y sobre todo, mucho más que indios y vaqueros pegándose tiros. Una historia de vida, con acción, pero sobre todo en la que, pecando en algunos momentos de exceso de moralina, se intentan contar historias humanas. Y con muy buen resultado. Una película genial, totalmente recomendable, y que dificilmente podrá ser superada. De obligada visualización.

En un New York apocalíptico, sueltan a Will Smith en un coche potente acompañado de un perro de copiloto derrapando por las esquinas y armado hasta los dientes para defenderse de... todo? El amago inicial de plagio de Mad Max crea algo de expectación por lo exótico de los escenarios y las enormes posibilidades que se abren para el transcurso de la trama. Pero a medida que pasa la película va perdiendo interés debido a que Will Smith no engancha, que la trama no está muy lograda y sobre todo que se echan en falta personajes secundarios que enriquezcan la historia. Lo de los "enemigos" es de chiste. Error brutal de guión y de selección de los protagonistas, ante una trama que inicialmente prometía algo muy sabroso. Y el final... qué decir... que se les acabó la pasta e hicieron despedida y cierre a la francesa.