Película británica de principios de los setenta del genero policíaco (gangsteril, más bien).Narra la historia de un peligroso delincuente que,con la ayuda de varios cómplices, se fuga de la prisión en la que cumple una larga condena,con la finalidad (autentica obsesión) de vengarse de todas las personas que le han traicionado. La primera en la lista: su esposa.
Hay carreras, peleas, homicidios, venganzas, actos de amor y de desamor, lealtades y deslealtades, traiciones y demás. Un aceptable retrato del mundo del hampa (los "bajos fondos") de la Inglaterra de aquellos años.
Como curiosidad argumental digna de resaltar: el rechazo de algunos integrantes de ese mundillo a las armas de fuego ("esto es Inglaterra, no América. Aquí ni la policía [the cops] llevan esos trastos").
Si te gusta el cine negro, genero policíaco o como quieras denominarlo, probablemente te gustará, o cuando menos te entretendrá.

Una de las primeras películas del famoso director francés, la dirigió con 27 o 28 años. Por mi parte, la calificaría de curiosa, entretenida y con un guion (adaptación de la novela de David Goodis) hasta cierto punto original: Un pianista ha tenido que desaparecer, cambiar de nombre y de lugar de residencia para huir de la perniciosa influencia de su familia. Sus hermanos (exceptuando el más joven, apenas un muchacho) son delincuentes. Pero no podrá escapar de ellos…
La cinta mantiene el interés hasta el final, aunque la conclusión es algo disparatada.
Nota 6.5

Francia, años cincuenta. Un colegio de muchachos está dirigido por un individuo que trata a todo el mundo unas veces mal y otras peor. Esto incluye (sobre todo) a su propia esposa, directora y propietaria del colegio, que, pese a lo infeliz que es viviendo a su lado, no ha sido capaz de divorciarse de su marido debido a sus profundas creencias religiosas. Un día, esta mujer y una profesora del colegio, amante del déspota, deciden poner fin a esta situación. Llevan a cabo sus maquiavélicos planes (asesinarle y hacer que parezca un suicidio) con gran esfuerzo y muchos remordimientos por parte de la esposa. En apariencia todo ha salido bien, pero entonces cosas muy extrañas comienzan a ocurrir…

Película en blanco y negro de la que destaco lo siguiente:
- El argumento, muy interesante. Hace que el espectador se "enganche" al relato casi desde el principio.
- La puesta en escena, absolutamente correcta.
- Es trabajo de los actores: supremo. Paul Meurisse está que se sale
- La dirección de H.G. Clouzot: la de un auténtico profesional del 7º arte.
En suma, una magnífica cinta a la que podemos calificar, sin ningún genero de dudas, de obra maestra.
¡Véanla, disfrútenla y súfranla!

El duelo Boris Spassky contra Bobby Fischer en Reykjavík, Islandia, por el campeonato del mundo de ajedrez en 1972 es uno de los momentos más recordados no sólo de la historia del ajedrez, sino de la Guerra Fría y del siglo XX. Bobby Fischer, el ajedrecista estadounidense derrotó a su rival soviético en medio de un comienzo marcado por sus ridículas y extravagantes exigencias.
En general los usuarios de FA valoran bien esta película, pero no hay demasiadas puntuaciones altas, muchos le otorgan un 6, otros un aprobadillo raspado. Obtiene unos cuantos suspensos y un puñado de notables y sobresalientes. Los hay que señalan, y en esto centran su crítica, que aún basándose en hechos reales el rigor histórico brilla por su ausencia, omitiendo acontecimientos bastante importantes en la vida de Fischer y simplificando hasta el ridículo otros. Hay quien critica que se presente a Boris Spassky como poco menos que una estrella de rock, con sus gafas de sol y agasajado por un séquito de aduladores, cuando en realidad era un caballero respetuoso y amable.
Yo lo poco que se del tema lo he aprendido viendo esta cinta.
En mi opinion:
- El argumento: Para mí es correcto. Supongo que los realizadores se habrán documentado lo mejor que han podido. Quizá se han tomado alguna licencia. No lo sé.
- La puesta en escena: excelente, muy buen ritmo.
- El trabajo de los actores: Muy bueno. Yo destacaría sobre todo a Peter Sarsgaard (el cura que acompaña siempre a Bobby Fischer).
Una buena película que los amantes del ajedrez van a disfrutar, y a los que no lo sean le gustará igualmente.

Estados Unidos, finales del siglo XIX. A un oficial de caballería que odia a los nativos americanos se le ordena trasladar a un viejo jefe Cheyenne enfermo de cáncer y su familia, al territorio de Montana, de donde son originarios y donde este hombre quiere acabar sus días. Ha pasado varios años en la cárcel por haber luchado contra el hombre blanco (que le arrebató sus tierras) y haber cometido no pocas atrocidades. Por su parte, el oficial americano, que ha hecho su carrera en buena medida luchando contra los "indios" tiene no poca sangre en sus manos.
La expedición se pone en marcha, pese a las protestas del oficial, que no quiere sacar al indio de la cárcel. A lo largo del camino tendrán que enfrentar muchas complicaciones y peligros, lo cual dará lugar a que ambos hombres (sobre todo y muy especialmente el militar americano) hagan una profunda reflexión y den un vuelco a sus actitudes y creencias.
Esta película es muy LENTA, lo cual no la resta calidad, y como digo en el título de mi crítica, el tema principal son los SENTIMIENTOS de las personas. Personas que, en esta historia, han sufrido y están sufriendo EL ZARPAZO DE LA VIDA. Recomiendo que la vean pero no esperen ver un "western" clásico. Destaco el trabajo (excelente) de los protagonistas, y los bellísimos paisajes en que está rodada.