Admito que empecé a ver esta película con reticencias. Se lo difícil que es hacer algo que de verdad valga la pena en el campo de la Ciencia Ficción y el hecho de que ya nadie se acuerde de ella (o casi), dice mucho al respecto. Si bien, por respeto a sus dos protagonistas masculinos, grandísimos interpretes que con su sola presencia salvan mínimamente la cinta, me senté a verla. ¿Qué me ha parecido? Muy floja. El argumento toca un tema con muchas aristas: los sueños, y por lo general, solo un director verdaderamente por encima de la media puede crear algo con un mínimo de calidad. Además se pasa de la Ciencia Ficción al campo de la política, las ambiciones personales, las traiciones, una pequeña historia de amor…, un batiburrillo que hace que la historia se descontrole completamente. Si eres muy amante del genero (la C.F.) puede que te guste si no la has visto.
Una curiosidad que no quiero dejar de señalar: los dos intérpretes de los que hablé antes, Max von Sydow, y Christopher Plummer, ambos caballeros del séptimo arte, nacieron el mismo año (1929) con unos pocos meses de diferencia, y nos han dejado así mismo en un lapso de tiempo muy corto: Von Sydow en marzo del año pasado (90 años) y Plummer el pasado mes de febrero (91 años). Su legado nunca morirá. Descansen en paz ambos.