Película propagandística para elogiar la figura y milagros durante la WW2 de John Fitzgerald Kennedy el mismo año en que fue asesinado, y también tiene pinta de dar una buena imagen de las fuerzas armadas en un momento en que no eran tan populares y les quedaba poco para entrar en la guerra de Vietnam.

La película está bien rodada, con una buena fotografía y ambientación, los actores hacen una buena interpretación con un Cliff Robertson correcto, aunque bastante soso. El problema es que la película tiene poca acción y es muy repetitiva la historia, dando una imagen de Kennedy como un gran líder, que resuelve todos los problemas y siempre se pone ante el peligro el primero.

La película tiene una duración de 140 min algo desproporcionado, si la hubiesen limitado a 80 o 90 min hubiese sobrado para contar lo mismo, al final se hace la película aburrida e interminable por que no hace más que alargarse innecesariamente.

Como curiosidad y por la época en que se hizo merece la pena verla, pero no es para echar cohetes.