Ante todo esta película es preciosa, épica y emocionante en no pocos momentos. Kurosawa es uno de los titanes de la historia del cine, jamas nadie ha rodado mejor el movimiento en pantalla, es un mago de la fluidez, también de la edición.

Si le doy a Ran un 8 y no un 9 es porque no tiene ese pulso narrativo que sí tiene los siete samuráis, que durante más de tres horas jamás se et hace largo y nada sobra. En Ran hay momentos que se alargan de más, son pocos pero al final suman y traban la narrativa principal. No suelo decir esto muchas veces pero así lo he sentido. Y yo no soy de los que se quejan de obras largas, ya que tengo sendos dieces a Lawrence de arabia, Stalker o la citada obra capital de Kurosawa.

Lo demás, es imposible que una obra de este maestro baje del 8, porque tiene una mano para la imagen y la acción insuperable. Es un espectáculo la película, las escenas de batalla como siempre deslumbran...

El color es una baza diferente, pero tampoco me parece que añada mucho más al de por si majestuoso artesano que es Kurosawa con la imagen en blanco y negro. Me atrae más el uso del color, menos intenso pero más sutil, en Dersu Uzala. Es otra fotografia, otro colorido pero me llega más. Eso no quiere decir que la propia fotografia de Ran no sea magistral, lo es. Pero eso, me inclino mas por el Kurosawa del blanco y negro o del color poco saturado como en Dersu.

Lo dicho, tiene escenas hermosas, de puro drama y desolación, las del monseñor que son muchas. Otra gran obra de un autor de una filmografia casi insuperable.

8.5