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Voto de Plácido Eldel Motocarro:
8
Thriller. Drama Trevor Reznik, un empleado de una fábrica, padece desde hace un año un grave problema de insomnio, un mal que él oculta y que le provoca terribles alucinaciones. Debido a la fatiga se ha deteriorado tanto su salud física como su salud mental. Repelidos por su aspecto físico, sus compañeros de trabajo primero le evitan, y después se volverán contra él cuando uno de ellos pierde un brazo en un accidente en el que Trevor se ve involucrado. (FILMAFFINITY) [+]
20 de mayo de 2021
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Christian Bale es uno de esos actores metódicos que se imbuyen en el fondo de su personaje, arriesgando en ello, como en esta ocasión hizo, incluso su salud (quizá por ello bordó aquí su papel como más tarde hiciera, en “El truco final"), y esto es algo que se le debe reconocer independientemente de otras consideraciones artísticas; entre las que reconozco, como su peor defecto, la falta de naturalidad.

Y comencé en referencia a su protagonista por ser, ésta, una película profundamente intimista, profusamente basada en lo que desde su interior éste nos muestra. Y desde éste se nos enseña, un alma atormentada, el fluir de una paranoia, el discurrir de una anorexia, de una prolongada falta de sueño. Un insomnio que busca redimirse entre dos mujeres; una inteligente prostituta (Jennifer Jason Leigh) a la que pretende usar como psicoanalista sin que ésta lo pretenda, y una camarera en turno de noche y madre soltera (Aitana Sánchez Gijón) de la que comienza a enamorarse.

El maquinista es un empleado de un taller metalúrgico, un operario de maquinaria, ese es su oficio, y de ahí el rótulo de la película; pero lo mismo podría ser empleado de banca, reponedor de supermercado, o trabajar en una obra. Pero quizá esto defina su persona, su trabajo, para quien no tiene más vida que ésta, donde en realidad tampoco halla, satisfacción ni encaje. Y tener en cuenta esto, creo, que es la única manera de comprender el porqué de su título.

No indagaré en su argumento, el cual es excelente por cierto, pues no quiero revelar ningún detalle que pueda avisar sobre su final; pero quiero resaltar que éste se dibuja en un guión de gran intensidad, más que en sus diálogos o su nudo narrativo, en la continuidad de sus planos entre sus continuos giros.

Para terminar, y por evitar posibles engaños; recordaré que a pesar de ser una producción española, no es una película española. No lo es en ninguno de sus conceptos. En realidad la consideraría una cinta de cine independiente norteamericano, con dinero español, que fue además acompañado de un director de fotografía (Xavi Giménez), una banda sonora (Roque Baños), y una de sus actrices protagonistas (Aitana Sánchez Gijón).

Un drama psicológico que no deben dejar de ver todos aquellos que no les importe sumirse en las aguas profundas de la mente, y además descubrir; que aún se nos puede sorprender.
Plácido Eldel Motocarro
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