Si alguien me preguntara que es lo que más me ha sorprendido de esta serie producida por Ridley Scott es variedad de posibilidades que deja abiertas cada capítulo, de las cuales no se cumple aquello que a priori pudieras sospechar. La trama cambia de dirección sin dejar de ser verosímil, de modo de cada capítulo es imprevisible. No se estira el concepto como en otras series.

Esto es Raised by Wolves, mucho más que una serie de Ciencia Ficción ubicada en un escenario postapocaliptico; mucho más que una historia de humanoides (que no robots o androides), con rasgos y sentimientos humanos. Esta serie es mucho más de lo que parece, rebasa todas tus expectativas porque el texto de Aaron Guzikowsky que vértebra la serie es realmente original y creativo. Cada capítulo es único reflejando distintos conceptos.

En este sentido de capacidad de giros de guión es excitante, imprevisible. Pero también la riqueza narrativa, los juegos en los que vamos al pasado a través de Analepsis o escena retrospectiva, que altera la secuencia cronológica de la historia. Los actores están a la altura de lo que se espera haciendo más creible el guión, siendo memorable las actuaciones de todo el elenco, como Amanda Collin, Travis Fimmel, Abubakar Salim, Winta Mcgrath, Niamh Algar, etc.

Ridley Scott dirige los dos primeros capítulos dejando el listón muy alto, pero la continuidad es igual de sobresaliente.

Destacando la actuación femenina de Collins, en el papel de Madre, no diría que es una actuación feminista pero que si rompe con los estereotipos.

Definitivamente es una serie muy recomendable de principio a fin.

No os la perdáis.

Sigo en el spoiler.