Nomadland es una película que habla de soledades, de diferencias, de estilos de vida. De la importancia de no cuadrar en ningún lugar y de buscar tu lugar en el mundo del modo más auténtico e independiente del que puedes hacerlo. Tal y como dice un personaje secundario, lo que hacen los protagonistas de Nomadland, es lo que hacían los antiguos pioneros en el lejano oeste… Gente, con decepciones en las espaldas, sin ambiciones profesionales, sin interés en las comodidades… que no son ociosos, y aunque quizás no paguen impuestos si sufragan su propia independencia…. y van realizando trabajos temporales para ello. Nuestra protagonista pasa cada año una temporada trabajando en un centro amazon, o en la recogida de la remolacha, o en el mantenimiento de un campo de caravanas. Conocer gente especial, que espera de la vida lo mismo que tú, que entiende tu deseo de intimidad o tus ganas de hablar. Un estilo de vida libre, hippy, fuera del sistema. Una comunión con la naturaleza espectacular. Frances MacDormand está espectacular, como siempre su rostro adusto expresa muy bien estos sentimientos. El Oscar lo merece, sin duda alguna. El paisaje es fantástico… Ese Estados Unidos de montañas horadadas, de valles sin fin, de desiertos con púas… como las almas de las personas que viven en su propia caravana. La pregunta es… y el futuro? Cuándo no tengas fuerza ya para cargar palas de remolacha? Pero lo cierto es que no hay más futuro que el hoy y desear con fuerza ir a encontrar ese lugar que hace años te conmovió el corazón.