Al comienzo de la película se advierte que puede provocar ataques epilépticos por la cantidad de imágenes impactantes que contiene. Bliss es una especie de híbrido entre "Mandy" de Panos Cosmatos y "Climax" de Gaspar Noe. El film resulta una locura y rápidamente se convierte en una orgía de sangre, ruidos y colores fuertes algo que puede trastocar al espectador.

A mí ya de por si me tiran un poco para atrás este tipo de historias con personas drogadas todo el tiempo que deambulan como zombis, pero hay cosas que pueden salvarse en este film.

Dezzy (Dora Madison) es pintora de cuadros, pero no vende ninguno, le falta inspiración, debe el alquiler y su novio es un completo imbécil. Cuando acude a su traficante, le ofrece una nueva droga que según él va a cambiarle la vida. Después de tomarla se ve metida en una orgía de sexo y más drogas. A la mañana siguiente Dezzy está como colgada, algo ha cambiado en ella, le ha vuelto la inspiración pero está sedienta de sangre...

Filmada en 16 mm en solo 24 días (se ve en la textura y el grano) el director Joe Begos que tiene en su haber dos películas de terror de serie B algo flojas que son "Casi Humanos" y "Poder mental" nos muestra aquí una historia vampirica muy loca y desatada que puede convertirse en una de las películas de terror más extrañas y fascinantes del año. Toda una inmersión profunda y aterradora en el centro de Los Ángeles a través de una protagonista inquietante que es Dora Madison. Una actriz versátil que puede llegar lejos.

Pudo verse en el pasado Festival de cine de Sitges y tendrá estreno en España el 31 de enero de 2020
Destino Arrakis.com