Primera película rodada en color y única en inglés de Truffaut. Se trata de una adaptación de la novela homónima de Ray Bradbury publicada en 1953, autor que quedó muy satisfecho con la película. El título corresponde a la temperatura a la que arde el papel.

Ya desde el inicio, una pequeña pincelada de genio: no introducir letras en los títulos de crédito, sino que son hablados. Buah.

Cierto, que por el lado estético puede que haya perdido, pero no lo veo como un descalabro como en otras obras de ciencia-ficción. Pasa la prueba bastante bien. Pero creo que esto es accesorio. Lo realmente notable es el mensaje, y éste conecta claramente y de manera elegante con el espectador.

Por supuesto, las noticias que leen los protagonistas no son periódicos, sino novelas gráficas sin letras.

Creo que Julie Christie, al realizar dos personajes, la esposa de Montag y Clarisse, lo hace realmente bien. No es fácil, y realmente no se diferencian mucho, a excepción del corte de pelo (uno corto y otro largo), pero la idea de interpretar a las dos es muy buena. Me gusta mucho cómo interpreta a una mujer totalmente abducida por el poder de la “familia”, una especie de emisión en televisión que secuestra la personalidad de los ciudadanos. Por otro lado, es una maestra en prácticas que es rechazada*

Creo que la importancia de la película no es solo la propia película, sino a donde te lleva, qué te hace pensar, reflexionar, investigar, y llevarte a otro nivel. Además es atemporal, vale lo mismo para 1966 que para 2024. Incluso diría que está ahora más vigente que nunca, con la utilización de las redes sociales y los teléfonos móviles.

Es realmente notable cómo Truffaut filma la quema de libros. Era un gran amante de la literatura, y filma estas hogueras como si realmente fuera una gran tragedia (que lo es). No puede faltar un ejemplar de Cahiers du Cinema, aparte de otras grandes obras, como el Quijote, la primera que aparece o Dalí, quizá el libro con sus obras pictóricas donde más se recrea.

Es un gran Truffaut, pues navega fuera de un género que no le es natural (ciencia-ficción), un lenguaje (inglés) que es un hándicap, y aún así no sólo sale airoso, sino que culmina una gran película, quizá no del todo redonda. Pienso por ejemplo, en un Kubrick, que hubiera sido mucho más agresivo, pero creo que el tono empleado es perfecto. Otra obra más que notable del gran director francés. A veces pienso que está infravalorada.