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Voto de Wanchope:
6
5,2
14.362
Intriga. Drama
Jack (George Clooney) es un mercenario solitario, un asesino a sueldo con un gran talento para el crimen. Sin embargo, tras un problema al ejecutar un trabajo en Suecia, se refugia en un pueblecito italiano, donde decide realizar una última misión por encargo de una mujer: la fabricación de un arma. Su intención es retirarse después. Mientras la fabrica, traba amistad con el cura del pueblo (Paolo Bonacelli) y comienza a intimar con ... [+]
16 de septiembre de 2010
10 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Jack, de profesión asesino a sueldo, recala en un pueblecito italiano en mitad de la nada buscando esconderse del mundanal ruido toda vez que su último encargo no ha salido como estaba previsto. Alejado de los quehaceres de su solitaria aunque bien remunerada vida profesional, poco a poco irá descubriendo las posibilidades de una existencia alternativa más gratificante, saludable y, sobre todo, ausente de toda violencia, lo que le llevará a tomar una, cinematográficamente hablando, inevitable decisión: el próximo encargo será el último... Este viene a ser el argumento de este "americano", un film cuyo título por cierto remite a un western protagonizado por Glenn Ford en 1955. ¿Y a que su punto de partida, dejando de margen algún detalle suelto, suena un tanto familiar?.
Efectivamente, la base sobre la que se sustenta el segundo largo de Anton Corbijn ('Control') no es para nada una novedad, aunque a su favor cabría matizar que se inspira en una novela publicada en 1990. Si partimos de unas cartas marcadas, la pregunta reside en el cómo se han movido estas sobre la mesa para saber si el juego merece la pena. Así pues, ¿que se ofrece de nuevo al margen de deleitarnos con el para nada desdeñable cuerpo serrano de Violante Placido? Poca cosa más, la verdad, al margen de un film modélico cuyo visionado resulta tan convincente como irrelevantes son sus resultados al final. En resumen, un largometraje que puede resultar tan correcto como prescindible, y un allá usted en toda regla al que en todo caso le podemos etiquetar un "para fans de Clooney" por salir al paso.
En "otra" vida Corbijn era fotógrafo. Hasta que se cansó y decidió probar suerte en el mundo del cine buscando en la narrativa un reto añadido que no fue capaz de saciar con los videoclips que dirigió para grupos como Depeche Mode o Nirvana. Y no cabe duda de su experiencia con los encuadres y las composiciones, algo que se evidencia en la elegancia formal de la que hace gala 'El americano', un film de un notable acabado visual gracias a la discreta belleza y naturalidad de sus encuadres, sobre todo, en el empleo de la luz dentro de los mismos, alejada del gusto esteticista del que suelen adolecer los excesos de otros "importados" al "mundillo" y en el que la imagen es usada para dar forma y cobijo a su argumento. Al margen y por suerte Corbijn sabe manejar bien los tiempos, los diversos elementos que hay en escena y a sus actores, demostrandose conocedor de que sin un fondo adecuadamente modelado el marco carece de interés, cumpliendo con la exigencia de narrar un historia que si bien puede pecar de predecible y tópica no deja de estar bien contada.
Efectivamente, la base sobre la que se sustenta el segundo largo de Anton Corbijn ('Control') no es para nada una novedad, aunque a su favor cabría matizar que se inspira en una novela publicada en 1990. Si partimos de unas cartas marcadas, la pregunta reside en el cómo se han movido estas sobre la mesa para saber si el juego merece la pena. Así pues, ¿que se ofrece de nuevo al margen de deleitarnos con el para nada desdeñable cuerpo serrano de Violante Placido? Poca cosa más, la verdad, al margen de un film modélico cuyo visionado resulta tan convincente como irrelevantes son sus resultados al final. En resumen, un largometraje que puede resultar tan correcto como prescindible, y un allá usted en toda regla al que en todo caso le podemos etiquetar un "para fans de Clooney" por salir al paso.
En "otra" vida Corbijn era fotógrafo. Hasta que se cansó y decidió probar suerte en el mundo del cine buscando en la narrativa un reto añadido que no fue capaz de saciar con los videoclips que dirigió para grupos como Depeche Mode o Nirvana. Y no cabe duda de su experiencia con los encuadres y las composiciones, algo que se evidencia en la elegancia formal de la que hace gala 'El americano', un film de un notable acabado visual gracias a la discreta belleza y naturalidad de sus encuadres, sobre todo, en el empleo de la luz dentro de los mismos, alejada del gusto esteticista del que suelen adolecer los excesos de otros "importados" al "mundillo" y en el que la imagen es usada para dar forma y cobijo a su argumento. Al margen y por suerte Corbijn sabe manejar bien los tiempos, los diversos elementos que hay en escena y a sus actores, demostrandose conocedor de que sin un fondo adecuadamente modelado el marco carece de interés, cumpliendo con la exigencia de narrar un historia que si bien puede pecar de predecible y tópica no deja de estar bien contada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
'El americano' es una apuesta adulta, cabe agradecer, en la que prevalecen los valores artísticos por encima de otras consideraciones, sustentada en una intención dramática que dota de credibilidad un relato de apariencia sólida y pretendidamente realista, en una especie de reverso algo más terrenal y sobrio del Bourne de Greengrass. Filmada como si de un western moderno se tratase, género al que se le rinde tributo en no pocos elementos y del que toma prestada su estructura y amaneramientos, es ineludible evidenciar que la figura de George Clooney resulta omnipresente en un relato para el que elabora un personaje frío, distante e introvertido alejado de los que nos tiene acostumbrados, cercano al que Jean Reno popularizase en la obra más recomendable de Luc Besson, y al que da vida con la eficiencia de un actor de su porte y experiencia ante la cámara, un personaje parco en palabras que justifica y excusa la realización de una película en la que no por casualidad el actor ejerce de productor. El resto de actores o actrices se mueven con acierto a pesar de su condición de comparsas, personajes satélite a los que no obstante dotan de cierto fondo con apenas un puñao de trazos, resultando por lo general convincentes y adecuados en su cometido.
Con estos mimbres es inevitable que a cada cual le vengan a la mente varios títulos previos, en mi caso escogeré 'León, el profesional', tal vez por mi querencia hacia la obra maestra de ese artesano del entretenimiento que es Luc Besson recuperado para la causa con la reciente 'Adele y el misterio de la momia'. 'El americano' es uno de esos films que se dejan ver, a los que resulta difícil criticar y que mantienen el interés durante todo su metraje, que no es poco, incluso logrando algun que otro momento a tener en cuenta. Pero al mismo tiempo carece de ese algo relevante y nuevo por lo que merezca ser recomendada o, al menos, tenida en cuenta en cuanto el rival a considerar posea algun tipo de entereza. Un producto, en suma, cuya profesionalidad si bien permitirá un visionado no le hará merecedora de una victoria ante una inclemente memoria que ejecutará, sin piedad alguna, su derecho a desechar todo aquello que resulte superfluo e innecesario.
Con estos mimbres es inevitable que a cada cual le vengan a la mente varios títulos previos, en mi caso escogeré 'León, el profesional', tal vez por mi querencia hacia la obra maestra de ese artesano del entretenimiento que es Luc Besson recuperado para la causa con la reciente 'Adele y el misterio de la momia'. 'El americano' es uno de esos films que se dejan ver, a los que resulta difícil criticar y que mantienen el interés durante todo su metraje, que no es poco, incluso logrando algun que otro momento a tener en cuenta. Pero al mismo tiempo carece de ese algo relevante y nuevo por lo que merezca ser recomendada o, al menos, tenida en cuenta en cuanto el rival a considerar posea algun tipo de entereza. Un producto, en suma, cuya profesionalidad si bien permitirá un visionado no le hará merecedora de una victoria ante una inclemente memoria que ejecutará, sin piedad alguna, su derecho a desechar todo aquello que resulte superfluo e innecesario.