... La historia queda por supuesto sin concluir: ese otro participante en las fiestas con las niñas al que no se le reconoce en las fotos y las pistas dadas nos llevan inevitablemente hacia el rico terrateniente, rescoldo del recién extinto régimen franquista y que, en cierto modo, parece ser "protegido" por nuestro poli malo, igualmente rescoldo del mismo régimen, al no investigarle cuando aparentemente puede existir algún indicio como el del perfume de la mano; igualmente, el poli bueno, en un alarde de corporativismo hacia su compañero, hace borrón y cuenta nueva sobre lo que ha descubierto sobre él y al final, con un culpable muerto y otro entre rejas, se da por resuelto el caso sin seguir tirando del hilo... como tristemente parece que sucede de vez en cuando en la cruda realidad.

En ese sentido, y no sé si tendrá algo que ver, pero esta película me recuerda sobremanera al caso de las niñas de Alcasser en muchos de sus aspectos (ambiente rural, niñas violadas y asesinadas...), donde algunos pagaron como cabezas de turco y donde quizás otros más poderosos, que nunca se llegaron a conocer si llegaron a existir, salieron indemnes... La Justicia es ciega, pero llega hasta donde llega ó hasta donde le permiten llegar... como en "La isla mínima", quizás.