A menudo me pregunto que es lo que debe tener una película para llamarse "clásico". La que trato en cuestión lo tiene: muy buen guión, muy buenos actores pero, sobre todo, una historia que a todo el mundo de una u otra forma gusta. Ford retrata siempre con un toque simpático a Irlanda, de donde él procedía. La historia tiene además toques de humor muy agradables, con el simpático y avispado casamentero siempre en su carro, de parte de Thornton pero crítico con su actitud. Yo nunca podré decir que este tipo de películas son increíbles obras de arte, porque las películas de este genial director no pretenden transmitir moralejas ni hacernos realmente pensar. Están hechas para el gran público y a fin de cuentas su objetivo es entretener y que uno salga con una sonrisa al terminar la película. Eso lo consigue con creces, y no hay que pensar sobre ella mucho más allá. A aquellos que quieran ver crudeza y realismo con tintes históricos no les recomiendo a Ford, eso es evidente. Él decía que hacía cine para ganar dinero y, yo no creo que fuera exactamente así porque la forma de contar las historias es tan genial que no la he visto en otros cineastas. Son casi cuentos que suelen incluir un narrador (alguno de los personajes de la peli, en este caso el reverendo empeñado en pescar a Arthur) y algunas imágenes tienen un impacto visual tan fuerte y dramático que de golpe Ford nos gana la partida y se adueña de nuestra voluntad mientras reimos y disfrutamos con la ternura y la gracia de los personajes. No soy especialmente devoto de John Wayne, y sin embargo en esta película creo que hace un gran papel. De Mauren O'hara poco puedo decir, enamora a cualquiera. Pero me quedo con el casamentero cuyo nombre no recuerdo: parece una especie de duendecillo borracho de la conciencia, y ahí es donde veo realmente el clásico toque irlandés que tanto gusta a las mayorías. Total, película muy simpática cuyo máximo logro es realmente agradar al público con una historia bonita (quizás algo pastelosa) sin pararse a profundizar en nada ya que no es el objetivo de la misma.