Película altamente triste y melancólica que cuenta un par de días en la vida de Gertrud, una mujer madura con pensamientos bastante claros referentes al amor. A lo largo del metraje se muestra su relación con su esposo, a punto de terminar porque él le pone más interés al trabajo que a su pareja, ella busca una libertad y un renacer artístico.

Además se observa a Erland Jansson (Baard Owe), un joven músico con quien Gertrud tiene una aventura, sin embargo el muchacho está más interesado en el alcohol y las fiestas que en ella. A su vez está Gabriel Lindman (Ebbe Rode) un poeta con quien Gertrud tuvo una relación en el pasado.

Finalmente se muestra a Axel Nygen (Axel Strøbye) un personaje con un papel menor en el film pero de gran importancia para la protagonista, ha sido amigo de ella durante muchas décadas y pareciera ser, el único que la ama de forma sincera, al menos como amigo. Sí, la película pudiera resultar bastante cursi.

La película en general cuenta con una excelente fotografía en blanco y negro, a su vez cabe mencionar que el film es muy teatral (se pasa), gestos y movimientos muy comedidos, así mismo vale la pena ponerle cuidado a las miradas, pocas veces los personajes se ven a los ojos, situación que se vuelve por momentos incomoda debido a que se ve poco natural esos largos diálogos sin que los protagonistas se miren.

En fin, es una película apenas rescatable que sigue el deseo de una mujer por encontrar el amor verdadero, el problema es que se vuelve algo tediosa por lo mencionado en el párrafo anterior, aparte que puede volverse algo repetitivo, aunque si es una obra al menos de interés, al ser el último film del realizador danés.