Me ha encantado. Guión de Eli Roth + producción de Quentin Tarantino = sangre y frikismo a raudales.

Me ha llamado la atención la poquísima repercusión que ha tenido tan magnífica película del género, no he visto ni un anuncio, ni un cartel en mi ciudad, vamos, que conozco la película por internet, básicamente.

La película es puro disfrute para los amantes del cine de lucha asiático, en todo momento con el toque ¨Eli Roth¨, lo que viene a ser montones de sangre y mutilaciones.

Los actores no es que sobresalgan realmente, pero es lo de menos, lo interesante aquí es la historia y como se va desarrollando, y sobre todo, la multitud de peleas y muertes a lo largo de la película.

Muchisima acción y montones de tias buenas, montones de muertos y escenas realmente explícitas y burras.

Quizá lo más flojo de la película sea la música, y es que meter a ratos rap por medio de una película así, pues la verdad es que no pega nada.
Digna de los amantes del cine bizarro.