Haz click aquí para copiar la URL
Argentina Argentina · Buenos Aires
Voto de MatiasR:
2
Serie de TV. Thriller Serie de TV (2013-2015). 3 temporadas. 45 episodios. El asesino en serie Joe Carroll (James Purefoy) es un psicópata extremadamente peligroso capaz de conseguir generar un culto enfermizo en torno a su persona. Ahora ha conseguido escapar de prisión con la determinación de terminar su "obra". El antiguo agente del FBI Ryan Hardy (Kevin Bacon), que encarceló a Carroll hace 9 años, parece ser la persona idónea para poder volver a ... [+]
15 de diciembre de 2013
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La publicidad engaña. El aparato mediático que apuntaló la serie “The Following” así lo demostró. Expectativa desmesurada para un proyecto televisivo que evidenció demasiadas carencias en muy poco tiempo y que fueron agravándose paulatinamente con el avance de la historia y que decantaron en un final que pareció una parodia de sí mismo.

De entrada, “The Following” tenía varios tópicos recurrentes en el género thriller de los últimos años. Por un lado, un asesinato brutal, que se llama Joe Carroll, pero carismático y que siempre está un paso por delante de sus perseguidores. Por el otro, un antihéroe (interpretado por Kevin Bacon) traumatizado, solitario y que, sin buscarlo, se encuentra con la posibilidad de una redención. El duelo de sagacidad y astucia está servido.

Hasta ahí, todo muy corriente. Sin embargo, esta serie introduce una alternativa interesante: Joe Carroll no está solo, tiene toda una secta de asesinatos que lo admiran y que lo ayudaran en su plan maestro. En este punto surgen dos inconvenientes mayúsculos: el primero es que Carroll no tienen ningún plan. O, por lo menos, no un plan que justifique rodearse de una treintena de psicópatas. La planificación fallida del villano es el motivo principal por el cual la serie no entusiasma al espectador, ni mejora a medida que se suceden los capítulos. Por el contrario, da vueltas en círculos, alargando excesivamente situaciones que no conducen a ningún lugar. Pasan muchas cosas, pero no se sabe bien para qué.

El segundo problema es que las motivaciones de los integrantes del culto están muy poco claras. Son personajes planos y que presentan un nulo desarrollo. La mayoría de ellos son extras. Sí bien hay un intento de explicación en los fanáticos de Carroll que tienen incidencia en los hechos principales, a través de flashbacks (otro recurso trillado), pero son muy breves y escuetos como para que den cuenta de un trasfondo emocional. Peor es el caso de otros personajes importantes como Roderick (segundo al mando de Carroll) o Molly (una infiltrada de Carroll en la vida de Bacon) que directamente caen del cielo en la trama.

Por su parte, los “buenos” no escapan de la mediocridad. Muchos mueren antes de que sepamos su nombre y otros sobreviven a situaciones increíbles. Por ejemplo, el agente Weston, quien sería el Robin de Bacon, y sólo está para ser secuestrado, golpeado, apuñalado sin que el orden de los factores altere el producto. La agente Parker es el único personaje que tiene una historia muy interesante como telón de fondo. Lamentablemente no se ahonda en ella.

El tercer gran problema que tiene “The Following” es la sucesión de hechos inverosímiles que son necesarios para que la historia avance. Muy pocas cosas son creíbles. Partiendo de la base de que Carroll organiza su culto desde la conexión a internet que tiene en prisión. Luego ira empeorando. Los personajes aparecerán y desaparecerán a gusto, sin importar si son buscados en todo el país o si están rodeados por las fuerzas policiales. Los seguidores del asesino se infiltran en todos lados: policía, SWAT, FBI.

Podría seguir, pero sería excesivamente reiterativo. No sólo no hay una idea clara que motorice las acciones a lo largo de varios episodios sino que tampoco hay resoluciones coherentes para las muchas situaciones que se desarrollan a lo largo de los capítulos. Los diálogos son otro aspecto mejorable, sobre todo los que mantienen entre sí Bacon y Carroll, primero en la prisión, luego por teléfono y en algunos encuentros puntuales. Las conversaciones iniciales tienen su atractivo pero rápidamente se vuelven reiterativas y tediosas.

El nivel de actuaciones es, en general, bajo. Kevin Bacon hace lo que puede con lo que tiene, que es poco. Está correcto en su faceta de hombre duro, pero es demasiado inexpresivo en otras vertientes que requiere su personaje. James Purefoy sobreactúa demasiado su faceta carismática. El resto no aporta nada. Sin embargo, las cosas siempre pueden empeorar. Habrá una segunda temporada por más que no se sepa por qué. Se estrenara en el 2014. No cuenten conmigo. Con “Game of thrones” me alcanza.
MatiasR
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow