Media votos
5,1
Votos
271
Críticas
262
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de devilman:
1
4,2
57
Terror. Thriller. Fantástico
Elena es secuestrada de niña y confinada al infierno. Años después reaparece y se reencuentra con Facundo, su hermano, pero Elena llevará a su familia al terror de su pasado. (FILMAFFINITY)
27 de agosto de 2020
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Muy mal debe estar la crítica cinematográfica argentina para que semejante despropósito haya merecido un 100% de valoración positiva de la crítica especializada. O será que en estos tiempos de corrección política basta que alguien se declare feminista para que alaben cualquier bazofia que haga. Se supone que estamos ante una película de terror, pero este engendro lo único que da es sueño. Ni terror, ni miedo, ni inquietud. Solo asombro porque alguien haya considerado en serio esta porquería. Un argumento inexistente, una actuaciones de pena que van de la sobreactuación más penosa a la completa falta de expresividad. Un inframundo que parece ambientado en una de esas obras de teatro vocacional de los años `60 cuidado por unos guardianes que parecen salidos de "El Marginal" y una bruja que se limita a contorsionarse como si tuviera un ataque de hígado y no es más que una señora mayor con un batón negro y una línea negra en la barbilla. Vomitiva.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Entre las docenas de escenas absurdas y cutres merecen destacarse aquella donde Pfennig y Bustos intentan voltear la puerta de la habitación donde tienen secuestradas a las niñas. Un primerísimo primer plano desde adentro muestra que hay una barra de acero cruzada sobre dos soportes para impedir que la abran desde afuera. No obstante, en el mejor estilo yanqui revientan la cerradura (que como hemos visto no existe) de un tiro y derriban la puerta.
O la de Machín relamiéndose como un imbécil antes de entrar en la habitación de las niñas
O la de Machín relamiéndose como un imbécil antes de entrar en la habitación de las niñas