Al cine americano le faltan las ideas y eso se nota. Con el auge del cine de terror oriental, ahora tan de moda y viendo el éxito que este tipo de películas están cosechando por todo el mundo, se están dedicando a hacer un remake (en algunos casos hasta con secuela incluida) de cada film de terror proveniente del continente asiático y así sacar la máxima rentabilidad y beneficios posibles haciendo muy buena caja en la taquilla como quien cose, con una nula originalidad y fotocopiando ideas prestadas de gente que posee verdadera creatividad. Así pues, si 'Ringu' marcó el inicio de una oleada de grandes éxitos del cine de terror oriental, 'The Ring' lo hace con los remakes americanos dispuestos a sacar beneficios de donde hay muy poco de donde coger, elevando a sus originales al límite de la mediocridad. Estamos ante un filme sumamente aburrido, que empieza despertando el interés en el espectador durante los primeros 30 minutos de metraje pero que pasado ese transcurso de tiempo se torna excesivamente monótono y cada vez más falto de interés. No obstante, se le deben alabar virtudes como la creación de un miedo interior cada vez más extenso que se adueña de nosotros y nos crea una gran sensación de temor hacia lo desconocido y hacia lo inesperado, al igual que la fantasmagórica atmósfera que por desgracia acaba cansando.

En lo referente a las interpretaciones, Naomi Watts empezaba a cobrar su merecida popularidad con una buena interpretación, sin sobreactuar en ningún momento como les sucede a muchas actrices dentro del género y aportándole gran solidez a su personaje. Martin Henderson no posee mucho carisma y no llega al nivel alcanzado por su compañera femenina. Destacar la corta pero intensa aparición de Brian Cox y del joven David Dorfman, realmente inquietantes en sus roles. En cuanto al guión escrito por Kruger, decir que es uno de los más aburridos que he tenido la desgracia de contemplar y que no fomenta el entretenimiento a lo largo del metraje.

En resumen, una floja película de terror y de intriga que inició la oleada de remakes americanos del cine de terror oriental que aún hoy siguen asolando nuestras pantallas con su mediocridad y su falta de ideas. Para el espectador que crea encontrar algo superior al original le diré que encontrará un filme sumamente aburrido y plano, que general miedo pero que posee una alarmante incapacidad para seguir despertando el interés y la curiosidad del espectador hasta el medio sorprendente final que siguiendo los patrones escritos, tiene su secuela.

·LO MEJOR: la meritoria capacidad de generar miedo en el espectador. La sólida interpretación de Naomi Watts.

·LO PEOR: el guión escrito por Ehrén Kruger condena a la película al aburrimiento absoluto.