Con el mismo regocijo con el que me he tragado sus seis episodios de escueta media hora —no se me va de la cabeza que no era el formato adecuado, es poco menos que darle un canapé a un famélico— me hubiera comido doce de una hora a lo serie normal y corriente o veinticuatro de noventa minutos a lo Nicolas Winding Refn o Steve McQueen.
"Reyes de la noche" no solo me ha resultado una grata sorpresa sino que es (e intuyo será) mi serie favorita del 2021. De diez a nivel historia y guion, de diez a nivel tono, de diez a nivel dirección, de diez a nivel actoral… En fin, tristeza absoluta que solamente vaya a quedar en esto. No sé quién fue el inepto que no supo ver todo el potencial que había en esta creación de Cristóbal Garrido & Adolfo Valor, pero merece lo peor. Netflix (o quien sea), rescata "Reyes de la noche" y pasa ya de dar luz verde a toda esa morralla que produces cada año.