Hace dieciséis años el bueno de Johnny Deep era nominado al Oscar por su interpretación de Jack Sparrow. Ahora, cinco películas más tarde, nadie osa tomarse en serio ni a Deep ni a Sparrow ni a una saga que, desde hace tiempo, navega por mareas misteriosas solo tolerables para el devoto.
Flojo remake encubierto de “Piratas del Caribe (El cofre del hombre muerto)” (Gore Verbinski, 2006) el obrado en “Piratas del Caribe (La venganza de Salazar)”. Aquí, el mítico y pulposo Davy Jones, y su pesquera y aún más carismática tripulación, es sustituido por un soso y desaprovechado Salazar y su aún más sosa y desaprovechada fantasmal tripulación. Y no es el único cambio a peor, la verdad. La ambición también se ha debido caer por la borda en algún momento de la travesía. Esta quinta entrega de la franquicia, con sus menos de dos horas de metraje, es la más corta de todas. Lo que denota hartazgo por parte de sus artífices, un hartazgo que se termina contagiando al espectador.
En verdad “Piratas del Caribe (La venganza de Salazar)” tiene más elementos remarcables que la insípida “Piratas del Caribe (En mareas misteriosas)” (Rob Marshall, 2011), pero tengo la sensación de que aquella exprimió mejor lo poco que tuvo. Hagamos un rápido y breve recuento: Javier Bardem como villano, y el retorno de los personajes de Orlando Bloom y Keira Knightley. Tres elementos más interesantes que toda la cuarta entrega de la saga junta. Pero al final todo resulta muy desganado, sabe a poco.
Otro defecto que preside “Piratas del Caribe (La venganza de Salazar)” es su efervescencia. La película de Joachim Ronning & Espen Sandberg empieza por todo lo alto, con la magnífica presentación de Salazar y una estupenda set-piece de acción con velado homenaje a “Fast & Furious 5” (Justin Lin, 2011). Pero a partir de ahí el globo empieza a desinflarse y no se recupera en ningún momento, ni siquiera en su desaborido clímax final.
En fin, muy desangelada esta “Piratas del Caribe (La venganza de Salazar)”. El devoto echará el rato sin problemas, aun asumiendo que el nivel de las dos primeras cintas nunca volverá. Yo prácticamente no me acuerdo de la cuarta entrega, y aventuro que no tardaré demasiado en empezar a olvidar est… ¿De qué estábamos hablando?