Odio perder mi tiempo, y que una película me fuerce a escribir una crítica negativa hace que lo pierda el doble. Durante los primeros minutos el director se esfuerza en prepararte para algo interesante, para tirarlo todo por la borda. ¿De que me sirve una introducción tan interesante si a continuación me presentan un argumento aburrido y sin ninguna emoción?
Recuerdo que a mitad de la película le pregunte a mi pareja si podíamos marcharnos, porque no podía soportar por un segundo más este pseudo-documental sobre un hecho al que no merece la pena dedicar más de cinco minutos.
Que una panda de críos robe un libro podría ser interesante, pero el director consigue todo lo contrario.
Lo único que he aprendido con esta película es la existencia del libro. Gracias a Bart Layton dediqué una noche a intentar olvidar que había gastado mi dinero en tamaña estupidez. No creo que él se tome en serio a si mismo si acepta firmar este bodrio.